Page 66 - La Rebelión de Huánuco. Vol 1
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Volumen 1
Prólogo a la primera edición
pero unificadas finalmente en otra correlativa y asimismo de la época, que se
inicia en el folio 1 y prosigue sin interrupción hasta el actual folio 441. Por lo
demás, el contenido del documento coincide con las piezas enumeradas por
el Comandante Maíz y Arcas. Empero, dados los avatares de estos procesos,
cabe en lo agible la aparición de nuevos expedientes que modifiquen estas
hipótesis de trabajo, tanto en lo que toca al ordenamiento procesal como a las
colaciones bibliográficas que presentamos.
Del examen conjunto de estos expedientes surge la visión completa de
la rebelión en el Partido de Huamalíes que revistió caracteres de la más definida
tipicidad. Espigando en los testimonios, confesiones y careos, se allega un con-
siderable caudal informativo sobre sus distintos aspectos y principales actores.
El ambiente geográfico de esos pueblos era propicio a los levanta-
mientos del tipo de guerrilla o montonera; y los indios habían dado reiteradas
muestras de su belicosidad en anteriores y muy señaladas ocasiones y en sus
continuos alborotos contra los Justicias y los curas. Los excesos de las au-
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toridades en esos alejados parajes contribuían a ahondar sus resentimientos
y, por otra parte, los insurgentes huanuqueños movieron en esos pueblos los
resortes más adecuados para provocar su rebeldía, convenciéndolos de que se
les privaría de sus modestos comercios y sus tierras y empleando argumentos
que concuasaban con su idiosincracia.
Estos manejos de los jefes insurrectos se comprueban plenamente des-
de la iniciación de la sumaria (Doc. XLVI). Como cabeza de proceso figuran
en autos las cartas remitidas por Crespo y Castillo a los Alcaldes de diversos
pueblos indios, con órdenes expresas de que se leyeran en cabildo y circularan
por todos los demás pueblos del Partido. El caudillo intimaba a los indios para
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30. Los indios de Huamalíes promovieron continuos tumultos y motines desde el s. XVII, agudizados en la décimaoctava centuria.
En 1732, los de la doctrina de Llacta y de Jesús y Baños, suscitaron disturbios por la recaudación de tributos y, al año siguiente,
contra el Corregidor y el cura de Baños (Cf. A.N.P. Derecho Indígena y Encomiendas, Leg. XV, c. 359). En 1777, se señala el grave
suceso ocurrido en el mismo pueblo de Llacta y en otros inmediatos contra el Corregidor, Ignacio de Santiago y Ulloa, su Teniente, el
Coronel Domingo de la Cajiga y el Jefe de Milicias, Capitán José de Cajiga, que culminaron con el asesinato de éstos dos últimos. En la
debelación del movimiento participó D. Juan de Echevarría y se formó proceso de este conato subversivo en el cual se voceaba el grito
de «libertad de España». Motivaciones de este alzamiento fueron los abusos de las autoridades, entre ellas los tratos y comercios, y los
excesos en los repartos. Además de los autos conocidos del proceso que figuran en el A.N.P., conviene mencionar el juicio seguido
en 1819 contra la testamentaría de Echevarría, de interés porque ofrece datos sobre el ambiente de la Provincia y los manejos de las
autoridades en el comercio de mulas, cascarilla, etc. Cf. Manifiesto legal del Señor Coronel Don José Vidurrezaga en el que funda la
legitimidad de su crédito contra la Testamentaría, del Señor Coronel Don Juan de Echevarría por la recaudación que hicieron en la
Provincia de Huamalíes, Don Juan de Ulloa, Don Domingo Cajiga y el referido Echevarría. Lima, Impreso en la Real Casa de Niños
Expósitos. Año de 1819. Por los años de 1778, se registra otro conato contra el mismo Corregidor Ulloa, encabezado por el Cacique
Eusebio Cervantes y Pomachagua. (Cf. Mss. B.N.P.). [Nota de la autora].
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