Page 681 - La Revelión de Tupac Amaru II - Vol. III
P. 681

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             La rebelión de Túpac Amaru II
            tenía una estera y por comida dos onzas de biscocho cada día y fue tratado como
            el mas mínimo pongo del rebelde, que lo mismo estara padeciendo el Señor Cura
            de Velille, que tiempos ha está preso y ahora pocos días lo despachó Bermúdez,
            digo Chuquiguanca, al Señor Cura de esta Don Manuel de Boza. Con estas no-
            vedades nos mantenemos los clérigos mas alertos y a un buen caballo; y siempre
            que nos juntamos no podemos dejar de hacer memoria con lágrimas que verti-
            mos de nuestros pasados padecimientos, especialmente nosotros dos de Llusco y
            Quiñota, con nuestros compañeros que son el Doctor Don Ignacio Santisteban,
            el Doctor Estrada y el Doctor Bobadilla. Por lo que el General Laysequilla y otros
            somos de parecer, que se detenga Vuesa Merced un poco más de tiempo en esa
            ciudad hasta que esto del todo se serene, que todavía esperamos tener algunos
            ataques con los enemigos. A fin de lograr quietud y el que Parvina se nos rindiese,
            escribímosle la adjunta carta con sentimientos de todos los señores que gobiernan
            esta tropa y nos respondió Parvina, la que incluimos, y aunque segunda vez le es-
            cribimos otra, ya no nos respondió, porque ya había partido de Colquemarca para
            esta a la batalla, que dicha segunda carta nuestra la tiene el Doctor Capetillo. No
            tenemos que ofrecernos a Vuesa Merced porque sabe que lo amamos de corazón
            y deseamos ocasiones de servirlo y quedamos rogando a Nuestro Señor guarde a
            Vuesa Merced muchos años. Santo Tomás y marzo veinticuatro de mil setecien-
            tos ochenta y uno. Besamos las manos de Vuesa Merced sus más finos amantes
            compañeros y amigos que de veras lo amamos, verlo y servirlo deseamos.— Pedro
            Moscoso.— Mariano Alvarez.—

                    (Al margen: Posdata)
                    Tenemos que prevenir a Vuesa Merced que hoy domingo veinticinco a
            las seis del día, llegamos a nuestra Doctrina desde Santo Tomás, trayéndonos las
            cabezas de Parvina y Bermúdez, para que a la tarde camine con ellas a esa ciudad
            el Señor Don Ventura Cáceres con seis soldados, que le daremos de aquí, para que
            lo vayan guardando por el camino y conduzcan a Juan Vilca: uno de nosotros sale
            mañana para Colquemarca, arrastrando toda nuestra feligresía, que se unirá con
            la tropa mayor que va a salir por Livitaca a Tungasuca.— Asencio Tito y demás
            presos ya quedan castigados aquí mismo.— Vale.—










                                               680
   676   677   678   679   680   681   682   683   684   685   686