Page 621 - Debate Constitucional 1993 - Tomo II
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nuestro ser podamos compartir. Cuando, por ejem-  todos, de pensar mucho en algo como la pena de
                  plo, señalo lo siguiente: los senderistas conside-  muerte.
                  ran que su organización es una máquina de muer-
                  te. Ellos, los subversivos, sostienen además que  Por eso, porque estoy a favor de la vida, es que
                  la vida la llevan en la yema de los dedos, y están  también estoy a favor de la pena de muerte.
                  prestos a ofrendarla. Asimismo, creen que la
                  muerte es una realización, pues ellos mismos se  Yo creo que hay muchas maneras de defender la
                  autocalifican de novios de la muerte. Castigar-  vida; una de ellas es, justamente, aplicar en aque-
                  los con la pena de muerte es volverlos a su diná-  llos casos mínimos en número, pero importantes
                  mica diaria y casi consustancial a ellos. No es  en lo que ellos significaron, aplicar, repito, la pena
                  por lo tanto disuasiva y es contraproducente pa-  de muerte.
                  ra un proceso de pacificación, porque podría glo-
                  rificar o crear mártires y convertir en héroes  ¿Es lícito matar a otra persona? Definitivamen-
                  martirizados a los terroristas, y ello no es obje-  te, sí. Nadie puede dudarlo hoy en día. Es lícito
                  tivo de nuestra sociedad.                   matar en la guerra, es lícito matar en defensa
                                                              propia, es lícito matar en defensa de los que uno
                  Por estas razones no estoy de acuerdo con la lla-  quiere y ama. Yo estoy dispuesto a matar a al-
                  mada sanción de la pena de muerte, pues la vida  guien si quiere matar a un hijo mío, y estoy se-
                  es un don precioso que se nos ha dado y no tene-  guro que todos los aquí presentes también lo es-
                  mos autoridad para quitársela a otro, aunque éste  tarían. Incluso hay gente que cree que es lícito
                  haya cometido el hecho más nefando.         matar cuando uno defiende bienes importantes,
                                                              y eso lo vemos cuando roban bancos, cuando asal-
                  Estoy por una cultura de la vida, aunque esto es  tan camiones, transportan dinero, etcétera.
                  algo irónico en un país donde miles de niños se
                  mueren de hambre o por enfermedades y pestes.  Yo creo que la segunda pregunta sería, ¿es con-
                  Pero, aun así, no envilezcamos más esta existen-  veniente la pena de muerte? Se ha argumentado
                  cia creando héroes y mártires donde no existen y  una serie de cuestiones hoy día, sobre diferentes
                  respondiendo como el hijo de Adán y Eva, que
                  con una quijada de burro en la mano mató a su  puntos que tocaré muy tangencialmente.
                  semejante, es decir, a su hermano Abel. No vol-
                  vamos, señor Presidente y señores congresistas,  Yo creo que sí es conveniente, hoy día, aplicar la
                  a la ley de la selva, a la ley del talión. Devolva-  pena de muerte. Se habla de que en vista de que
                  mos vida a los cultores de la muerte.       el Gobierno ha logrado disminuir —como es un
                                                              hecho— el terrorismo, que el 80 por ciento de
                  Muchas gracias, señor Presidente.           los líderes del MRTA o de Sendero están ya pre-
                                                              sos, entonces, ¿para qué preocuparnos ahora y
                  El señor PRESIDENTE.— Tiene la palabra el   empezar a discutir la conveniencia o no de apli-
                  doctor Jaime Freundt-Thurne.                car la pena de muerte?

                  El señor FREUNDT-THURNE OYANGU-             Señor Presidente, no caigamos en el triunfalis-
                  REN (NM-C90).— Señor Presidente:            mo. Sendero Luminoso, quizás como institución,
                                                              esté al borde de ser destruida y pegando los últi-
                  Estamos discutiendo hoy día el problema de la  mos coletazos, pero hay varios, demasiados indi-
                  pena de muerte. En cuanto la bancada de mi iz-  viduos pertenecientes a esa secta, que todavía
                  quierda baje el volumen, voy a seguir hablando.  están en condiciones de producir grave daño a
                  Muchas gracias.                             este país.

                  Creo que el problema de la pena de muerte es,  No seamos, repito, triunfalistas. Sendero toda-
                  indudablemente, un problema de conciencia. Por  vía existe y tenemos que estar preparados y lis-
                  eso comienzo con la palabra "yo".           tos para poder aplicar la pena de muerte, por lo
                                                              cual yo creo que todavía es conveniente.
                  Yo soy médico, señor Presidente, y he sido médi-
                  co durante muchos años, y, como médico, mi fun-  He dicho, y lo repito, que la pena de muerte es
                  ción en la vida ha sido salvar vidas, quitar sufri-  un problema de conciencia. No voy a tratar de
                  miento, mejorar la condición de vida de mucha  convencer a nadie, como que no creo que nadie
                  gente. En mi especialidad, esto fue hecho a nivel  me va a convencer a mí. Esto se ha venido pen-
                  de niños.                                   sando desde hace muchos años y creo que cada
                                                              uno debe tener su opinión muy bien formada.
                  Por eso es que yo creo que la vida es algo que
                  tiene que respetarse, por eso es que yo creo que  Creo, también, que si se decide por aplicar la pena
                  tenemos la obligación, no sólo los médicos sino  de muerte o, más aún, si se extiende, como dijo



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