Page 620 - Debate Constitucional 1993 - Tomo II
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me recordaba hace algunos instantes el Decano  que ha asolado con coches-bombas y con la cul-
                  del Colegio de Periodistas vía telefónica— que  tura de la muerte ciudades enteras.
                  muchos periodistas hubieran sido muertos y fu-
                  silados.                                    Pero en Colombia han logrado, en medio de es-
                                                              tas calamidades, promulgar una Constitución el
                  No quiero imaginarme lo que ocurriría a los ami-  5 de julio de 1991, que declara tajantemente, en
                  gos Quijano, Gutarra y otros, como a aquellos  su artículo 11º, que el derecho a la vida es invio-
                  que, por ejemplo, ayer nomás, en el norte y en el  lable, que no habrá pena de muerte. Eso dice tex-
                  Cusco, fueron detenidos bajo supuestas acusa-  tualmente.
                  ciones de ser colaboradores de elementos sub-
                  versivos.                                   Señor Presidente, antes de que me corte, yo le
                                                              suplico, y por intermedio suyo al Pleno, que me
                  Señor, en marzo de este año, nuevamente la Con-  dé unos minutos adicionales para concluir mi
                  ferencia Episcopal Peruana, hablando en el do-  participación.
                  cumento, precisamente de la cuaresma, que es
                  sinónimo de tiempo de gracia, se refiere a la ne-  Bien, señor, muchas gracias.
                  cesidad de que, para poder quebrar la espiral de
                  violencia, la respuesta del Estado debe ser cui-  Hay que recordar que el Perú, además, ha sus-
                  dadosa e inteligente. Se debe evitar cuidadosa-  crito el 28 de julio de 1978 la Convención Ameri-
                  mente —dice la Conferencia Episcopal— afectar  cana de Derechos Humanos, así como que el 15
                  a inocentes e incurrir en excesos.          de diciembre de 1989, también con su voto, apo-
                                                              yó la adopción de un protocolo para la abolición
                  Por otra parte —agrega—, no debemos ceder a  de la pena de muerte por la Asamblea General
                  la provocación ni caer en el pecado de la vengan-  de las Naciones Unidas. Existe, por ello, una tra-
                  za. Y nos recuerda textualmente, a través de un  dición abolicionista, pues la pena de muerte
                  texto bíblico que manda: "Cuiden que nadie de-  —mal llamada pena—, si fuera una pena, rege-
                  vuelva otro mal por mal".                   neraría, recuperaría al delincuente. Pero eso no
                                                              puede ocurrir con los pasibles de esta sanción, es
                  La Conferencia Episcopal Peruana repudia el te-  decir, no se les puede escarmentar; a los muertos
                  rrorismo, cualquiera sea su ideología, métodos y  no se recupera, ni menos ellos se arrepienten
                  acciones, porque considera la acción de los gru-  porque ya están al otro lado de la vida.
                  pos subversivos como violatoria de los derechos
                  humanos. Porque, además, es atentatoria, sobre  Alguien recordó que en el desfile militar del 26
                  todo, del derecho fundamental de la vida. Por ello  de julio uno de los batallones más aplaudidos fue
                  es que el máximo organismo de la Iglesia Católi-  el de los arrepentidos del MRTA y Sendero Lu-
                  ca Peruana, la Conferencia Episcopal, en el do-  minoso. De aplicarse la pena de muerte, esta san-
                  cumento referido sobre la cuaresma o tiempo de  ción, precisamente, no permitiría arrepentidos;
                  gracia, enfatiza en que si algo debe caracterizar  tampoco podría repetirse otro desfile como el del
                  el accionar del Estado es el respeto irrestricto de  26 de julio, donde podamos ver arrepentidos, ni
                  los derechos de las personas, para reafirmar lue-  menos integrantes de batallones aplaudidos.
                  go que la defensa de la vida es un valor que debe
                  prevalecer siempre y debe ser considerado una  Señor Presidente, tal como se discutió el artícu-
                  responsabilidad colectiva y expresarse en leyes e  lo 235º de la actual Constitución, que señala que
                  instituciones.                              no existe pena de muerte en el Perú, en la Comi-
                                                              sión Principal de la Asamblea Constituyente de
                  Por supuesto que muchos, desde la óptica de la  aquel entonces, en su sesión número 54 del 25
                  defensa de la llamada pena de muerte, postulan  de mayo de 1979, se sostuvo textualmente "Que
                  pues la necesidad de reimplantarla en el Perú  la muerte no es una institución del derecho
                  por el clima de violencia, terrorismo y destruc-  valorativo, sino del derecho primitivo". Suscribo
                  ción, que arroja un saldo de cerca de 25 mil per-  esa opinión, y pienso que el derecho no ha hecho
                  sonas muertas y más de 25 millones de dólares  otra cosa que realizar valores, y la muerte, defi-
                  de daños materiales en infraestructura.     nitivamente, no es un valor. Además, en esta
                                                              misma sesión se señaló textualmente que "Toda
                  Quiero, señor Presidente, decirle a usted, y por  la ciencia del derecho universal establece que el
                  su intermedio a todo el Pleno del Congreso de la  derecho hace valores", y nadie puede aceptar que
                  República, que el Perú tiene casi una similitud  se hace valores matando al ser humano.
                  con el hermano y vecino país de Colombia. Ellos,
                  al igual que nosotros, soportan guerrillas y gru-  Señor Presidente, para concluir quiero hacer al-
                  pos terroristas por más de treinta años, sopor-  gunas reflexiones, reflexiones que ojalá se tomen
                  tan también la acción criminal del narcotráfico,  en cuenta y que ojalá desde lo más profundo de



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