Page 580 - Debate Constitucional 1993 - Tomo II
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las leyes que se necesitan para hacerlo viable o En lo que se refiere al tema, lo que yo voy a tra-
en denunciar los tratados, para que no nos colo- tar de demostrar en muy poco tiempo es que el
quen mal ante la opinión del mundo? tema de la pena de muerte no obedece a ninguna
razón jurídica, como tampoco a ninguna necesi-
Respecto a la opinión del mundo, quiero dividir dad de pacificar el país.
esto en dos.
El tema de la pena de muerte, en mi concepto, es
Los Estados Unidos no pueden decir nada. El un tema eminentemente político, y lo único que
Senado acaba de declarar que es crimen federal, se busca con él es ganar el apoyo de la opinión
susceptible de castigo con la pena de muerte, el pública para la causa del gobierno y su proyecto
que se comete en cualquiera de los 50 estados, de Constitución.
inclusive de los estados que han abolido la pena
de muerte, cuando el delito sea el de terrorismo. Si, como supongo, la mayoría y otros grupos po-
Nada tienen que decirnos los Estados Unidos. líticos no se van a resistir a la vieja y ancestral
costumbre de halagar a nuestro pueblo, en muy
En cuanto a la opinión europea, el señor Víctor pocas horas el tema de la pena de muerte estará
Joy Way, el señor Barrón y yo sabemos que ella aprobado. Pero yo quiero que me acompañen en
no recibe con agrado que nosotros extendamos unas breves reflexiones sobre lo que esto podría
el ámbito de aplicación de la pena de muerte; pero significar para el Perú.
hay que explicarles, también, la extremada pru-
dencia de este dispositivo. A nivel externo, es cierto que somos un país so-
berano y que nadie puede decirnos qué hacer.
En razón de lo cual, de su prudencia, yo, que he Pero la otra verdad es que la autarquía, como
sufrido y sufro con el tema de la pena de muerte, forma de vida de los pueblos, ha concluido y que
voy a acompañar a la mayoría. La voy a acompa- la realidad mundial presente es la interdepen-
ñar con pesadumbre, con profunda congoja, con dencia, no sólo económica sino también científi-
tristeza de hombre de derecho. Tristeza, congoja ca y tecnológica. Lo que significa que tenemos
y pesadumbre que me asaltan, porque lo que ha que actuar tomando en cuenta las corrientes in-
ocurrido en el Perú es lo que nos lleva, si se quie- ternacionales del mundo, las que nos dicen que,
re, a un retroceso jurídico respecto de la Consti- para hacer justicia, no es necesario dar la vuelta
tución anterior. y regresar a la jungla. Y mi convicción es que si
ahora aprobamos la pena de muerte, la pobre
Y yo también quería decir que no creo que esta imagen de nuestro país en materia de derechos
pena se aplique, porque aquellos a quienes debe- humanos se verá teñida de forma irremediable,
ría de aplicarse más obviamente, están presos y porque la reinserción del Perú en la comunidad
no se les puede aplicar retroactivamente la pena. internacional no sólo es económica sino también
Que terroristas de segunda clase vayan a ser cas- ética, aunque este concepto difícilmente podría
tigados con la pena de muerte, va a producir un ser comprendido por algunos.
desequilibrio jurídico que la sociedad rechaza.
A nivel interno, yo no tengo ninguna duda de
Pero, en nombre de esa misma sociedad que al que alguien sonría por esto en Palacio, porque al
Estado toca proteger, señora Presidenta, me pa- fin tendrá las herramientas jurídicas que se re-
rece patriótico, me parece fuera de toda conside- quieren para tal vez comenzar su campaña elec-
ración electoral, me parece en servicio del alto toral con unos cuantos fusilados.
interés del Perú, votar, aunque sea con pesadum-
bre, como lo voy a hacer, por la fórmula que la Pero Sendero también sonreirá, porque no sola-
mayoría ha presentado. mente le vamos a entregar aliados en todo el
mundo, sino también y ellos lo saben mejor
Muchas gracias. que ningún otro que nada como unos cuantos
mártires para avivar el fuego de su alicaída cau-
La señora PRESIDENTA. Tiene la palabra sa.
el doctor Barba Caballero.
Creo también, señora Presidenta, que algunos
El señor BARBA CABALLERO (CD). Se- obispos y algunos cristianos también sonreirán;
ñora Presidenta: Yo también saludo su presen- pero a mí nada me parece más patético que ver a
cia en la Mesa, y espero que la mayoría tenga la unos siervos de un Dios de paz unirse a la trin-
sabiduría suficiente para mantenerla en esa alta chera de los que claman por la muerte.
responsabilidad, aunque no se la recomiendo,
pues se trabaja mucho y creo que se divierte uno Creo también que quizás habrá aplausos del pue-
poco. blo para esta medida y para este Congreso Consti-
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