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El perfeccionamiento que se ha hecho a todo el marco legal de asociaciones público
privadas y obras por impuestos apunta en ese sentido. Este es un esfuerzo normativo
enorme, pero hay que traducirlo en servicios para el ciudadano.

Eso nos parece que es lo central, en adición, evidentemente, a los proyectos que han sido
adjudicados; y los que van a continuar, van a ser siendo adjudicados en el tiempo. Como
vamos a ver cuándo vayamos a una revisión sectorial de la inversión pública y público
privada, la apuesta es poder seguir invirtiendo y apalancando en asociaciones público
privadas más recursos, más eficiencia y lograr mayor cobertura con calidad de los
servicios.

Definitivamente, el esfuerzo que se ha hecho en este gobierno ha sido notable y nos ha
valido reconocimientos internacionales, pero también somos muy conscientes de que
tenemos grandes desafíos. El último ranking de competitividad lo indica con mucha
claridad.(Ver cuadro 12.)

Hay tres aspectos que se señalan. Un primer aspecto es la calidad de las instituciones en
nuestro país, y eso afecta a todo el Estado, a los tres niveles de gobierno, a los poderes
autónomos, a todos.

Un segundo aspecto es la calidad de la educación, donde claramente este presupuesto, si
se tiene que caracterizar por algo, es el presupuesto de la educación de calidad, esta
gran apuesta que estamos haciendo todos, como un segundo factor estructural.

Y un tercer aspecto, como factor central que analiza este ranking de competitividad, es
que todavía no hemos dado el salto en diversificación productiva ni en una puesta de
mayor innovación.

Entonces, al poner estas reformas se hace un reconocimiento a lo que se ha logrado con
mucho esfuerzo y gracias a la aprobación de importantes leyes por el Congreso de la
República. No solo eso, sino que también hay que reconocer que tenemos mucho terreno
por recorrer para efectivamente consolidar nuestro desarrollo y seguir convirtiéndonos de
un país de renta media en un país de renta media alta, y, por qué no, en un país
desarrollado eventualmente.

Todo esto se ha hecho en el marco de una estabilidad fiscal y una estabilidad
macroeconómica que es reconocida como uno de los principales activos que tiene el
país. No es suficiente para darle desarrollo, eso lo sabemos; pero sin duda es un factor
indispensable, porque si no hay estabilidad macroeconómica, el país no puede seguir
progresando vía la inversión.(Ver cuadro 13.)

Y acá hemos visto el esfuerzo, digamos, cuando hay una diferencia entre el resultado
convencional del déficit y los superávit, como se ve, en los años pico, en los precios de
los commodities; y si uno le quita todo este factor cíclico, tenemos el resultado estructural,
quitándole el efecto del precio de los commodities y el efecto del ciclo económico. Vemos
que, básicamente, estamos entrando en una fase de política fiscal siguiendo reglas
fiscales sostenibles; porque la deuda pública se ha ido reduciendo en el tiempo, y
tenemos el segundo nivel más bajo de deuda en América Latina y entre los más bajos del
mundo, y podemos entrar a una fase de déficit estructural de 1% y usar estos recursos

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