Page 235 - La Revelión de Tupac Amaru II - Vol. II

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
La rebelión de Túpac Amaru II
usted lo que conceptue mejor. Cuzco y marzo veinte y siete de mil setecientos
ochenta.— Julián de Capetillo y la Sota.—

(Al margen: Otro)
El Sargento Mayor de Caballería de esta ciudad oída la propuesta por
el Señor Corregidor y la conferencia de los señores oficiales de la Junta, asiento
que se haga la numerasión de todos los vecinos, asi de honor, como honrados
y vagos, con las armas que cada uno tuviese quienes se les hará saber conse-
cuente que al tiro de dos cañones con prontitud ocurran a reunirse en las casas
de cabildo, donde existen presentes guardias custodiando el real erario y por
lo que mira a los gastos que puedan ocurrir, así a la paga de una compañia de
pie fijo en las veinte y cuatro horas, pólvora, y balas, algunos u otro pertrecho
necesario, se pueda sacar alguna parte de los propios de la ciudad, juntándose
con lo que algunos vecinos quisieren o pudieren concurrir formándose plani-
lla de gasto del día; que se deba embeber en la referida compañía inter el Señor
Corregidor, dé parte a Su Excelencia para la formal necesidad que ocurra en
adelante.— Cuzco y marzo veinte y siete de setecientos ochenta.— Gaspar
González de Rosas.—

(Al margen: Otro)
Don Marcos Antonio de la Cámara y Escudero, Alcalde Ordinario de
primer voto y Capitán Comandante del Real Tren de Artillería de esta ciudad:
habiendo oído la propuesta por el Señor Corregidor, coroneles y demás jefes
de esta Junta de Guerra, dijo: estar componiendo perfectamente a su costa
todo el tren de la artillería de su cargo y que dará perfectamente corriente en
el día y para el mejor manejo de ella, suplica a dicho Señor Corregidor, se sirva
mandar a alguno de los europeos que hay en esta cuidad a el presente y han
tenido este ejercicio en tropa veterana, me ayude a manejarla; se le dé título o
empleo de Alferez, que está vaco por falta de Don Cristóbal Alarcón, o con el
que fuese del agrado de dicho Señor, para que,1os artilleros existentes y nom-
brados aprendan con mayor perfección este ejercicio Es muy conveniente que
por bando de buen gobierno, se mande que todo vecino estante y habitante,
se manifieste con declaración de las armas ofensivas y defensivas que tienen y
los alisten los señores jefes de la milicia a las compañías que tuviesen por con-
veniente, para que reconociendo cada cual a su Capitán, esté pronto a su voz
y órdenes en lo que ocurra y que dichos capitanes les den a cada soldado suyo

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