Page 560 - Debate Constitucional 1993 - Tomo II
P. 560
están dentro de las cárceles ya no se les podría que se digan todas las razones que deben decir-
aplicar la pena de muerte, porque, salvo la se? ¿Queremos dejarlo por separado? Entonces,
retroactividad benigna, en el caso de la legisla- señor, que se aplique la guillotina al debate, y
ción peruana ninguna ley tiene fuerza ni carác- ojalá que sea para todos por igual; pero yo, en
ter retroactivo. nombre del Perú, deploro que, en un asunto de
tanta importancia, por razones de tiempo, se ten-
¿Qué encontramos en aquellos países donde exis- ga uno que callar cosas que aquí deben decirse,
te la pena de muerte, como los Estados Unidos, tanto más que las estoy diciendo...
por ejemplo? ¿Ha disminuido la criminalidad en
los Estados Unidos por el hecho de existir la pena El señor PRESIDENTE. Doctor Cáceres
de muerte? No, señor; las cárceles están cada día Velásquez, la intención no es guillotinar el deba-
mas llenas de gente. En consecuencia, no es te; lo que está invocando la Mesa es un esfuerzo
disuasiva ni en el Perú ni en ningún otro lugar. de síntesis e ir, fundamentalmente, a la parte
sustantiva. Entiendo, por ejemplo, que los pri-
De otro lado, hay otras razones de principio, que meros cinco minutos usted los utilizó para pedir
son fundamentales. ¿Quién es dueño de la vida que estos debates sean publicitados. Entonces,
humana? Yo diría que sólo Dios. Ni nosotros mis- yo estoy, y lo digo con todo el interés del caso,
mos somos dueños de nuestra propia vida. Por llevando los aspectos sustantivos de cada una de
eso es que las constituciones, siguiendo la prédi- las presentaciones. Simplemente invoco a todos
ca cristiana y de allí el valor de esa prédica, los oradores ir a la parte sustantiva, a fin de que
vienen consagrando los derechos de la persona todos podamos tener el beneficio para la vota-
humana como el eje fundamental de toda la es- ción final.
tructura constitucional.
Gracias, doctor.
Nuestra propia Constitución dice que la defensa
de la persona humana y el respeto de su digni- El señor CÁCERES VELÁSQUEZ, Róger
dad son el fin supremo de la sociedad y del Esta- (FNTC). Señor Presidente: Evidentemente, no
do, que todos tienen la obligación de protegerla he tenido suerte en muchas de mis intervencio-
nes; y sobre la primera parte a la que usted ha
y promoverla, que toda persona tiene derecho a
la vida. aludido, tampoco he tenido suerte, porque no veo
que se haya tomado ninguna disposición por parte
de la Mesa para superar la situación que había
Ahora bien, esta Constitución resulta que no se- señalado.
ría tan cierta; habría que colocar "con excepción
de lo establecido en el artículo tal", porque no Creo, señor, que la pena de muerte es una espe-
todos estarían involucrados dentro de estos dis- cie de homicidio legalizado y constitucionalizado,
positivos. Sería una Constitución ciertamente in- porque estamos autorizando a que se le quite la
sincera, porque más abajo establece restriccio- vida a una persona por otras personas, y ésa es
nes a los principios fundamentales que procla- la esencia de un homicidio.
ma.
Tengo que manifestar que con la pena de muer-
Creo, señor, que si sólo la Divinidad es dueña de te eliminamos la posibilidad del remordimiento.
la vida humana, lo que tenemos que hacer noso- ¿Cuántas personas, transcurrido el tiempo, se
tros es humanizar al hombre, como oí decir en percatan de sus errores y tienen remordimien-
una conferencia en San Marcos, y no bestializar to? ¿Qué dice el evangelio? "Hay mas alegrías en
al hombre; y una forma de bestializarlo es decir: el cielo cuando un pecador llega al cielo que cien
"Hay que castigar; hay que ejercer la función justos". Estamos eliminando la posibilidad de que
punitiva del Estado castigando el crimen; el ob- ese hombre, el sancionado, pueda beneficiarse con
jeto de esta sanción es castigar, no tanto ejem- el remordimiento. Estamos acortando su vida
plarizar, sino castigar a aquel que se atrevió..." injustamente, evitándole que tenga esa posibili-
dad.
El señor PRESIDENTE. Perdone que lo in-
terrumpa, señor Cáceres Velásquez. Y qué decir de los errores judiciales. ¿Los hom-
bres son dueños de la verdad? No, señor, pueden
Le estamos dando unos tiempos adicionales; yo equivocarse. ¿Cuántos casos ha habido? Podrían
le pido resumir e ir a lo sustantivo. citarse muchísimos. Otro aspecto que tengo que
señalar es éste: ¿la sociedad es ajena al crimen?
El señor CÁCERES VELÁSQUEZ, Róger No; se está demostrando que el delincuente lo es
(FNTC). ¿En un asunto de tanta importancia porque, en su aparato somático, en su naturale-
el objetivo de la mayoría y de la Mesa es evitar za, tiene deficiencias; estoy seguro de que con el
1438