Page 260 - Debate Constitucional 1993 - Tomo II
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Torres y Torres Lara y que nosotros no quere-  que Karl Löwenstein también señaló —en Teo-
                  mos: una sola Cámara tiene mucho más fuerza;  ría de la Constitución, página 246— que el con-
                  esto es real, pero no lo más conveniente. Noso-  trol intra órganos, incorporado al aparato legis-
                  tros no queremos tener Cámaras omnipotentes;  lativo, más importante políticamente y más efi-
                  una Cámara que lo pueda hacer todo, y a veces  caz funcionalmente es el sistema bicameral.
                  irreflexivamente. Por eso creemos que el siste-
                  ma bicameral es mejor, mucho más reflexivo.  Por intermedio de la Presidencia, alcanzo el pá-
                                                              rrafo, por si se le hubiese pasado, al doctor Car-
                  Sin embargo, nos dirán que en este sistema ac-  los Torres; con la mayor deferencia. Además, en
                  tualmente hay una mayoría, la cual podría o no  la misma página 246, señala como anécdota —y
                  ser responsable; en fin, eso lo dirá la historia. Si  la grafica— la discusión entre Washington y Je-
                  creemos que hemos venido acá para hacer refor-  fferson a la hora del desayuno; uno decía: "el Se-
                  mas constitucionales serias y que éstas tengan,  nado es el plato en que se enfría el café de la tasa
                  ojalá, el consenso que hasta ahora no existe para  de los representantes". Esto es la reflexión, es
                  que puedan durar en el tiempo, en buena hora;  dejar descansar las cosas, meditarlas con la al-
                  pero realmente no sabemos si esta herramienta  mohada por otra Cámara, dejar un espacio entre
                  que le damos al país, con la unicameralidad que  dos discusiones para buscar la eficiencia legisla-
                  ustedes pretenden, será mal utilizada, lo que  tiva, con lo que, a las finales, resulta mayor la
                  podría, lógicamente, significar muchos perjuicios  eficacia jurídica y también la seguridad jurídica.
                  a la Nación peruana.
                                                              ¿Qué decían, por ejemplo, otras personas entre
                  Nosotros queremos evitar las precipitaciones y  nosotros? El tratadista don José Pareja y Paz
                  los excesos. Por eso hemos creído en el sistema  Soldán expresa: "El unicameralismo, como lo ha
                  bicameral. Tampoco creemos en un Parlamento  demostrado la experiencia republicana peruana,
                  en el que deban estar simplemente los represen-  sólo se ha presentado en momentos de extremis-
                  tantes de las diversas circunscripciones, porque  mos políticos. La Cámara única es una invitación
                  esto significaría no tener un Parlamento de le-  a la ligereza y la precipitación. Más importante
                  gisladores sino de alcaldes, en el cual cada señor  que tener muchas leyes, es tener buenas leyes".
                  parlamentario vendría simplemente a pedir por  Temas constitucionales y constituyentes, página
                  su provincia o circunscripción territorial. Noso-  51.
                  tros queremos un sistema bicameral en el que,
                  por un lado haya una Cámara que represente a  Pareja agrega: "En abundancia de lo argumen-
                  diferentes circunscripciones, pero en el cual haya,  tado, nuestra historia constitucional nos enseña
                  por otro lado, una segunda Cámara revisora que  que todas nuestras constituciones han preferido
                  represente a toda la Nación, con diferente ori-  el sistema bicameral, con las solas excepciones
                  gen en cada una de ellas.                   de las que fueron radicalmente liberales, como
                                                              las de 1823, 1856 y de 1867, las que tuvieron bre-
                  En esta misma línea de ideas, queremos señalar  vísima vigencia".
                  también, como ejemplo, que el sistema bicameral
                  evitó que en el Perú pudieran haberse dado ma-  Podríamos seguir con las citas y encontraríamos,
                  yores excesos como en el caso de la banca y se-  lógicamente, muchas más. El doctor Carlos To-
                  guros y con la mal llamada nacionalización, que  rres, a su vez, va a encontrar otras. Yo solamente
                  no fue otra cosa que la incautación y la expolia-  quiero referirme, por ejemplo, a gente que vive
                  ción de tantos pequeños, medianos o grandes  actualmente, a los nuevos constitucionalistas, los
                  titulares de acciones de compañías bancarias, de  que tienen mucha experiencia, como por ejem-
                  seguros y financieras. Si no hubiéramos tenido  plo el doctor Domingo García Belaunde.
                  una segunda Cámara en la que en el interregno
                  entre la discusión de una y otra, el país hubiera  También publicado en Cuadernos Constituciona-
                  hecho sentir su expresión a través de la opinión  les, número uno, Domingo García Belaunde es-
                  pública; el destrozo que se hubiera hecho al país  cribe: "El problema es que los sistemas bicame-
                  hubiera sido realmente irreparable. Felizmen-  rales necesitan controles y contrapesos; enton-
                  te, con una segunda Cámara, que si bien no so-  ces, la segunda Cámara es un contrapeso ideal.
                  lucionó el tema pero por lo menos sí redujo el  Ahora, una de dos: o se hace un sistema de dos
                  problema, se pudo evitar los excesos de la Cá-  Cámaras o simplemente se mantiene una Cáma-
                  mara joven.                                 ra con contrapesos. Por ejemplo, veto reforzado
                                                              al Presidente, capacidad de vencer el veto con una
                  En esta misma línea de pensamiento, quisiera  mayoría muy calificada y además que la aproba-
                  señalar algunas otras expresiones. Por ejemplo,  ción de las leyes sea objeto de más de una lectu-
                  en la mañana, el doctor Carlos Torres mencionó  ra, un mínimo de dos o tres lecturas, si hubiera
                  a Karl Löwenstein, pero cuando se mencionan  el unicameralismo. El problema de la Cámara úni-
                  las cosas, hay que mencionarlas completas; por-  ca es doble",  agrega.



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