Page 401 - La Rebelión de Huánuco. Vol 5
P. 401
Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
La rebelión de Túpac Amaru II
aniquilar a los oriundos del lugar, quitarles sus tierras, o arrasarlas. No puede
imaginarse sugestion mas seductora que esta. Ella enserraba los interesanti-
simos objetos de la conservacion de su propia ecsistencia de la defensa de
sus pequeñas propiedades, a la que es tanto mayor el apego, quanto son mas
miserables sus poseedores, y ultimamente, la livertad de su Patria. Tales ideas
como estas son capaces de hacer impresion, no solo en unos espiritus, obs-
curecidos y con la ignorancia sino aun en otros que posean, conosimientos
superiores, y que sean ilustrados. A la verdad, que nada hay mas fasil, que una
insinuacion relatiba del propio interes con modo y utilidad, por la propencion
que cada uno tiene a aquello que le importa en grande manera.
Este es un prejudicio que arrastraran a las almas fuertes, y que a
manera de un rapido torrente, que desarraiga los arboles mas robustos, las
lleva consigo, presipitadamente, sin dar aquel espacio necesario para, que
se haga oir la imperiosa voz de la recta razon. La coaccion que es otro no
menor [ilegible] que impide y eberba, el pleno uso de una livertad racional
y prudente, ya la tiene Vuestra Alteza producida, en el pasaje de la confe-
cion de Rodriguez poco antes incinuada. De hecho ella aparece acreditada
por lo que este expone en su confesion de fojas 269 del Quaderno que
empiesa con la cabeza de proceso levantada por el Intendente. Preguntado
por el motivo que tuvo para suvlebarse, respondio que haviendo venido de
la montaña a la Ciudad por el mes de febrero, sin saver nada, que estubo
hasta la noche del dia veinte y dos del mismo, en que los indios insurgentes
llegaron hasta el Puente de Huaripampa, al que habiendo salido el Subde-
legado y otros a defenderse, concurrio llevando una escopeta de su uso
contra los insurgentes.
Note Vuestra Alteza que los primeros movimientos de Jose Rodri-
guez fueron de lealtad y no de conmoción, y lo que es mas digno de tenerse
presente para impetrada mitigacion de pena.
Continua diciendo que hasta la primera espedicion de los indios
de Ambo, no se metio con ellos, que retirandose a su chacra a los sinco, o
seis dias despues se encontró con los indios en el citado Puente de Hua-
yaupampa que lo atajaron para que fuese con ellos a la fuerza contra los
cuerpos que estaban en Ambo, a lo que haviendose excusado no admitie-
ron y le decian que seria alcahuete de los europeos. Reparese que ese era
un motivo bastante para recelar lo matasen lo que demuestra un miedo
grave y de aquellos que caen en [ilegible] constante y que escusan de pena.
400