Page 290 - Vida y Obra de José Baquijano y Carrillo - Vol-1

Volumen 1
Intervención de Baquíjano en el juicio que se le sigue a los Ugarte
dirigía a persuadir a vuestra excelencia, que el dictamen que la sugería era
el más conforme a las intenciones del soberano sólo se cuidaba de cerrar los
conductos del desengaño.
Me persuado lo habrá tocado vuestra excelencia muy a las claras y con
la misma esperanza de hacerlo presente a su majestad y al esclarecido Minis-
tro a quien tiene encomendada la dirección del reino; aspiro a ponerme a sus
reales pies confesando siempre la justificación, integridad y demás superiores
virtudes que tanto recomiendan a vuestra excelencia, y le hacen el objeto del
amor y veneración de estos dominios, atribuyendo sólo mis agravios, ultrajes
y padecimientos al excesivo ardor con que se ha deseado proteger las vivas
pasiones del señor Intendente del Cuzco. Dios nuestro señor guarde a vuestra
Excelencia muchos años, a bordo del navío La Caridad y marzo 31 de 1787.
Excelentísimo señor B.L.M. de vuestra excelencia su más atento servidor.
Antonio de Ugarte y Celiorigo

Fuente: A.G.I., Lima, Leg. 672.
Publicado por M. Maticorena: Nuevas noticias y documentos..., cit. en nota al texto núm. 1
de esta colección.

Memorial de Antonio de Ugarte recusando a los asesores Portilla y José Rezabal
Ugarte, cuya redacción se atribuye a Baquíjano
El Callao, 31 de marzo de 1787

[Al marge: Memorial]
Excelentísimo señor:
El coronel don Antonio de Ugarte y Celiorigo, en la forma que haya
lugar, parece ante vuestra Excelencia y dice que, habiendo interpuesto recusa-
ción en forma del señor asesor don José de la Portilla, oidor de esta real Au-
diencia, se sirvió vuestra excelencia nombrar para la decisión de el artículo al
señor don José Rezabal Ugarte, alcalde del crimen de esta misma real Audien-
cia, con cuyo dictamen se expidió un superior decreto intimado al suplicante
por el sargento mayor de la plaza, don Antonio Cantos, en el cual se declara
no haber lugar a la recusación por no interponerse jurada, ni firmarse por le-
trado conocido, y en su consecuencia, se le ordena pase dentro de tercero día
al Presidio del Callao a seguir en el Navío La Caridad; de cuya última parte,

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