Page 61 - La Revelión de Tupac Amaru II - Vol. II
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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
La rebelión de Túpac Amaru II
demás circunstancias de aquel suceso? ¿Qué afinidad tiene con esta causa la histo-
ria de la vida del siervo de Dios Fray Pedro de San José Betancur, fundador de la
Religión Bethelemítica? ¿Qué relación la de si desciende Betancur de Don Martín
de Arvieto, ni a qué influyen los méritos, verdaderos o inciertos de éste? ¿Ni a qué
fin alglomerar en el proceso las pruebas de los hijos y nietos de dicho Don Diego
Betancur, sus partidas de bautismo y casamientos, que nadie les duda ni les dispu-
ta, ni yo se lo niego en esta causa?
No obstante dicho Don Vicente ha hecho horroroso el proceso con testimo-
nios de las Historias de Garcilaso, de Herrera, de Calancha, de Arvieto y del siervo
de Dios Betancur. Yo prescindo de todo ésto, porque no me incumbe inculcarle esa
descendencia de Arvieto ni de ese parentesco de Betancur; porque nada de eso es
del presente caso. Lo que le importaba a la (parte) contraria es probar la descenden-
cia de Don Felipe Túpac Amaro, último Inca del Perú, que es la que le he negado y
niego; lo demás de Arvieto y de Betancur se lo permito o se lo concedo, porque ni
la descendencia de Arvieto ni la de Betancur lo han de hacer descendiente de Túpac
Amaro; pero lo cierto es que tan vana es aquélla como lo es ésta.
Tampoco le he disputado ni disputo a Don Diego Betancur, si tiene hijas
y si tiene nietos, y si éstas se casaron con Don Ventura Guevara y Don Vicente
García, y si los hijos de éstos son bisnietos de dicho Don Diego; confiésoselo lla-
namente, pero pregunto ¿a qué viene en esta causa presentar las fes de bautismos y
partidas de casamientos de las hijas, nietas y bisnietas del citado Don Diego? Prue-
be éste su entroncamiento con Don Felipe Túpac Amaro Inca; y ya con eso, sin en-
grosar este proceso podrían probar estos hijos, nietos y bisnietos, separadamente,
que aquél era su padre, su abuelo y su bisabuelo pero como el fin ha sido enredar
y confundir los autos, ha mezclado en ellos unos asuntos que les son extranjeros; y
que si algún influjo tienen, es el de la molestia y perdición del tiempo, que se gasta
en su reconocimiento.
El principio y el origen de esta supuesta descendencia de Don Felipe Tú-
pac Amaro, viene de Doña Manuela, madre de Don Diego Betancur. Esta desde
el año de mil seiscientos ochenta y tres, se presentó ante el Corregidor del Cuzco,
Don Pedro Balvín, pidiendo que se le recibiese información al tenor de varias
preguntas. Estas y el escrito en que se produjeron, tienen reparos de gravísimo
peso, que fundan la falsedad de aquella información. Titúlase, en el escrito, Doña
Manuela Túpac Amaro, ñusta soltera, natural que dijo ser del pueblo de Surimana
de la provincia de Quispicanche; de que resulta del primer reparo de inverosimili-
tud, que hace presumir falsa dicha información, porque el pueblo de Surimana no
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