Page 244 - La Revelión de Tupac Amaru II - Vol. II

Volumen 2
Antecedentes
Vuexelencia me dispensa tomara a bien esta mi determinación, pues que cede
en el mejor servicio del Rey y desempeño de mi empleo, expidiendo cuantas
providencias sean del superior arbitrio de Vuxelencia.— Nuestro Señor guar-
de la importante vida de Vuexelencia los muchos años que puede y necesita la
tranquilidad de estos dominios. Cuzco doce de abril de mil setecientos ochen-
ta.— Ignacio Fernández de la Cebal.— Excelentísimo Señor Don Manuel de
Guirior Virrey de estos Reynos.—

(Al margen: Otra)
Excelentísimo Señor.— Entre las providencias que me han sido nece-
sarias expedir, para precaver la conspiración anunciada a esta ciudad por los
pasquínes y denuncias de que he dado cuenta a Vuexelencia, me pareció pre-
cisa la de convocar una Junta de Guerra con los oficiales de los Regimientos de
Infantería y Caballería de esta plaza y los de plana mayor de las provincias, que
se hallan en ella; a quienes hice presente la actual constitución y lo practicado
de prevenciones, para que considerando todo expuciesen sus dictámenes; asi
lo hicieron y los han explicado separadamente por escrito, como lo advertirá
Vuexelencia en los papeles que a esta acompañan y en su conformidad proveí
el Auto que va a su final, para la práctica y ejecución, de lo que ha parecido
conveniente; y habiéndose continuado las guardias y rondas prevenidas, debo
decir a Vuexelencia que el empeño y fidelidad de este vecindario, ha dado las
mayores pruebas de su honor, practicando la gran guardia que por turno se
hace cada noche en estas casas capitulares, compuesta de las personas del ma-
yor carácter sin reserva de sujeto alguno, por edad, ni por distinción, con una
compañía de infantería, que guarnece este principal y la Real Caja y sala de ar-
mas, haciéndose por otra de caballería dobles rondas por toda la ciudad y sus
extramuros, en que el celo y cuidado del Coronel de Infantería Don Miguel
Torrejón y del Teniente Coronel de Caballería Don Mateo de Oricaín, en au-
sencia de su Coronel con los capitanes y oficiales de ambos cuerpos, han acre-
ditado sus obligaciones, desempeñándolas cumplidamente todos han llevado
la fatiga de un mes con amor al Rey y a la patria y permanecerá hasta la entera
quietud de las sospechas; pues aunque al presente no hay novedad particular,
que las aclare, se repiten algunos pasquínes y dan mayor mérito a estas pre-
venciones los sucesos de Arequipa y La Paz y espero me prevenga Vuexelencia
muchos años.— Cuzco doce de abril de mil setecientos ochenta.— Fernando
Inclán y Valdes.— Excelentísimo Señor Virrey Don Manuel de Guirior.—

243