Page 693 - Debate Constitucional 1993 - Tomo I
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ese gobierno desastroso de corrupción y por la Estoy en absoluto desacuerdo con ello; y como
secuela que el pueblo peruano nunca va a olvi- tenemos propuestas alcanzadas por escrito so-
dar. bre el particular, le ruego y suplico que en el
momento oportuno nos conceda el uso de la pa-
El señor PRESIDENTE. Puede continuar, labra.
señor Cáceres Velásquez.
Quiero terminar, señor Presidente, manifestan-
El señor CÁCERES VELÁSQUEZ, Róger do una vez más que deploro la forma como se
(FNTC). Señor Presidente: En el artículo 46º viene llevando adelante el debate de la primera
no se ha consignado la parte final del artículo ley de la República: de manera apresurada, abre-
pertinente de la actual Constitución. Yo planteo viada. Se nos pone una proyección en la cual,
que se reincorpore: "La ley señala la forma de quienes no tenemos lentes a la mano...
publicación y los medios de su difusión oficial";
porque no basta que se diga que tiene valor la El señor PRESIDENTE. Doctor Cáceres,
norma cuando ha sido publicada. No, señor Pre- quisiera recordarle que no hay ninguna separa-
sidente. Eso se puede manejar criollamente para ción en el tratamiento de todo este capítulo. Por
decir que la ley fue publicada porque se sacó una tanto, puede usted agotar su tiempo para tratar
copia que se distribuyó en tales lugares y ya se el punto que está planteando. No vamos a re-
cumplió con lo que dice la Constitución. Debe gresar especialmente para el tema de la nacio-
preceptuarse por la Constitución que será la ley nalidad, estamos tratando todos los temas inte-
y ningún otro dispositivo, como un reglamento gralmente.
o una resolución suprema, la que disponga la
forma de publicidad. El señor CÁCERES VELÁSQUEZ, Róger
(FNTC). Señor Presidente: Sin embargo, he
También debo señalar que simpatizo plenamen- observado que cuando hicieron uso de la pala-
te con la referencia propuesta por un grupo de bra los señores Pease, Moreyra y otros parlamen-
representantes para que se considere la Biblia tarios, dijeron lo mismo que yo he dicho, pero
como fuente de inspiración cristiana dentro del no han tenido la mala suerte de recibir una ad-
artículo 45º. No debemos tener temor de decir vertencia como la que usted me hace. Parecería
lo que somos: la abrumadora mayoría del pue- que usted estuviera prevenido contra mi perso-
blo peruano es católica. Si sometiéramos a refe-
réndum una consulta de esta naturaleza, estoy na y no contra las otras. ¿Por qué a los otros no
les ha hecho la misma observación?
seguro que el noventa por ciento diría sí y un
diez por ciento se declararía cristiano. ¿Por qué
hay temor de decirlo, señor Presidente? En la El señor PRESIDENTE. Señor Cáceres, lo
Constitución de Estados Unidos, que es una de único que le he recordado no sólo a usted, sino
las Constituciones maestras y ejemplares en el absolutamente a todos los congresistas es el
mundo, está considerada la Biblia. ¿Por qué no acuerdo del Pleno. Lo que pasa es que no voy a
la podemos incluir aquí? intervenir para recordar a cada congresista cuá-
les son las reglas. Simplemente, como usted hace
Más bien, discrepo en cuanto a la parte final. No una mención muy específica, he preferido preci-
creo que el Estado deba darle importancia a cual- sar el acuerdo del Pleno.
quier confesión oficial. Ese segundo párrafo del
artículo 45º lo concibo de la siguiente manera: Continúe, señor Cáceres Velásquez.
"El Estado debe también establecer formas de
colaboración con otras confesiones que acredi- El señor CÁCERES VELÁSQUEZ, Róger
ten contar con no menos del uno por ciento de la (FNTC). Señor Presidente: Soy miembro de
población, según los datos censales". De tal ma- la Comisión de Constitución, soy ponente y ha-
nera que no sea cualquier confesión, sino aque- blo a nombre propio. Por consiguiente, le ruego
lla que ya tenga una cierta representatividad que en su oportunidad, en una segunda vuelta,
popular, un cierto respaldo popular. en un tema tan importante que abarca tres ma-
terias totalmente distintas, pueda concederme
Señor Presidente, hay mucho que decir respec- el uso de la palabra.
to de la nacionalidad. Aquí en esta Constitución
estamos abdicando de legislar algo que es de No es posible que estemos debatiendo de una
primaria importancia en cualquier Constitución manera tan liviana los asuntos que más agobian
en el mundo: especificar quiénes son los perua- al país.
nos y quiénes no lo son; y cómo se adquiere y
cómo se pierde la nacionalidad. Esto lo estamos El señor Jorge Velásquez me solicita una inte-
dejando a la ley. rrupción, señor Presidente, por su intermedio.
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