Page 694 - La Rebelión de Túpac Amaru II - Vol-6
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Volumen 6
                                                         Causas criminales seguidas contra los rebeldes
            Cisneros escribía edictos, cartas y otras piezas, no lo hizo de su voluntad, sino
            de orden del rebelde, dándole éste los puntos sobre que había de escribir y que
            sino lo hubiera ejecutado, lo hubiera muerto infaliblemente.
                    16a    lten.   Digan si saben, les consta o han oído decir, que aunque
            Cisneros y Molina resolvieron venirse de Piccho para esta ciudad, no lo pudie-
            ron conseguir, respecto de que Hipólito Tupa Amaro y los indios del rebelde
            los tuvieron en medio y no les permitieron partir, antes positivamente les em-
            barazaron la fuga. Compeliéndolos a caminar por delante de ellos y sólo San
            Roque pudo escapar, por habérsele desatado la sincha de la silla y detenídose
            por esta coyuntura.
                    17a    lten.   Digan si saben y les consta o han oído decir, que Cis-
            neros no pudo hacer fuga de Tungasuca, porque los /.35v caminos estaban
            cerrados de centinelas, que lo hubieran muerto si acaso hubiera emprendido
            la fuga.
                    18a    lten.   Digan si saben, les consta o han oído decir, que Molina
            acometió a hacer fuga del lugar de Pucacasa, pero no lo pudo conseguir por
            haberlo denunciado al rebelde un indio a quien le encomendó su caballo y a
            esta causa el rebelde acometió a darle chicotazos.
                    19a    lten.   Digan si saben, les consta o han oído decir, que Molina,
            Cisneros, Zamalloa y otros españoles, persuadieron, esforzaron y alertaron a
            Jenuario Castro, para que hiciera fuga del campo del enemigo en Pucacasa y
            diera aviso a nuestro ejército del asalto que pretendía hacer el rebelde aquella
            noche y a esta diligencia se debió que se pusiese en salvo.
                    20a    lten.   Digan si saben, les consta o han oído decir, que Cis-
            neros, Molina, Zamalloa y otros españoles, determinaron quitar la vida al re-
            belde, dando para ello las armas Cisneros y aunque para el efecto se tiró un
            cañonazo de artillería contra la ventana de la casa en que estaba el rebelde, no
            tuvo efecto, porque dicho rebelde estaba siempre escoltado de sus indios.
                    21a    lten.   Digan si saben y les consta o han oído decir, que Cis-
            neros, hasta el último día en que logró su libertad, estuvo siempre hostilizado,
            perseguido y amenazado de los indios, especialmente en el último lance de
            Tinta, por haber proveído de armas para la muerte tlel rebelde en defensa de
            los sacerdotes, a quienes había resuelto quemar vivos.
                    22a    lten.   Digan si saben, les consta o han oído decir, que Molina
            y Cisneros, se mantuvieron siempre fieles /.36 al Rey Nuestro Señor y adversos
            al rebelde, y así lo expresaron en sus conversaciones, insinuando el doloroso



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