Page 225 - La Revelión de Tupac Amaru II - Vol. II

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
La rebelión de Túpac Amaru II
marzo veinte y seis de mil setecientos y ochenta.- Bernardo Antonio Ramírez
y Tinajero.—

(Al margen: Otro)
El recelo fundado que se ha propuesto por el Señor Corregidor de el
tumulto que amenaza, ya por los pasquines que se han encontrado y ya por
las noticias privadas, que se le han comunicado; lo que a dado mérito a tomar
las providencias que se han tenido por convenientes, para reparo del daño;
concibo por muy oportuna la de las guardias nocturnas, que se han puesto en
las casas de Cabildo y que estas deben continuarse, sin que al Real Erario se
le grave en contribución alguna; sino que el Jefe que se destinase, costee de su
peculio aquellos cortos gastos que sean precisos, como lo ofrezco hacer cuan-
tas veces me tocase el turno, como uno de los coroneles que se hallan en esta
ciudad, pero respecto de que es preciso esten listas y bien reparadas las armas
y que no falte la provición que se considere necesaria de pólvora y balas; es mi
dictamen que admitiéndose la liberal oferta que tiene hecha el Señor Conta-
dor Coronel Don Josef de Andía y que por ellas se le den las debidas gracias si
se concibiese algún aumento de estas especies, preciso se costee de los propios
de la ciudad. Y en atención a que el movimiento que se advierte no es de los
naturales, sino de mestizos y demás gente baja, que tal vez esta los pueda in-
ducir: se haga formal lista por barrios de tódos los habitantes y una menuda
averiguación del destino y ocupaciones de cada individuo, que de este modo
tal vez podrá rastrearse el origen de la sedición que se concibe sobre lo que
el Señor Corregidor resolverá lo que tubiese por mas conveniente. Cuzco y
marzo veinte y siete de mil setecientos ochenta años.— Josef de Saldibar y
Saavedra.—

(Al margen: Otro)
El Coronel de Milicias Españolas de la Provincia de Urubamba Don
Lucas Garay, a los puntos tratados en la Junta de Militares, que se hizo el día
veinte y seis del corriente, para los medios que se deban tomar sobre el tu-
multo que amenaza. Es de dictamen, se aliste la gente blanca capaz de tomar
las armas que haya en la ciudad y que den estos razón de las que tienen su-
yas, para saber con que número se puede contar de ellas: Que sino tiene por
conveniente el Señor Corregidor (como lo expuso) que se haga por bando
esta diligencia, se señalen sujetos de distinción, para hacer la numeración,

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