Page 682 - Debate Constitucional 1993 - Tomo II
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Se dice que llevamos una posición invariable de  Pero, señor Presidente, lo que realmente derri-
                  consigna. Yo quiero decirle personalmente, Pre-  bó a Leguía no fue la reelección, a pesar de su
                  sidente, que si bien adhiero a esta posición des-  carácter indefinido, sino el desastre económico
                  de hace algún tiempo atrás, sin embargo, lo que  —y hay que revisar la historia económica nacio-
                  mayor tiempo le he dedicado en los últimos me-  nal y mundial— generado por el famoso "Vier-
                  ses es justamente a evaluar, analizar, investigar  nes Negro" de la Bolsa de Nueva York, el 24 de
                  sobre los argumentos que presentan los partidos  octubre de 1929, que afectó a todo el mundo y
                  de la minoría para contraargumentar sobre la  concretamente al Perú, cuya política hacendaria
                  reelección inmediata. Y por eso, antes de susten-  estaba entonces basada fundamentalmente en
                  tar mi posición de por qué sí la reelección inme-  empréstitos.
                  diata, quiero comentar algo sobre los argumen-
                  tos de la oposición respecto al por qué no.  En el Perú, la depresión causó inmediatamente
                                                              muchos problemas. Entre ellos, voy a mencionar
                                                              los siguientes: los efectos de la fuerte caída del
                  Se han mencionado fundamentalmente cuatro,  precio del algodón y de la lana en el mercado in-
                  que, en una y otra forma, lo han estado mencio-  ternacional; acentuación de la caída del precio
                  nando casi todos los que me han precedido en la  internacional del azúcar; inestabilidad moneta-
                  palabra. Se ha hablado de la experiencia negati-  ria por la baja del cambio; restricciones en el cré-
                  va de Leguía, un argumento; otro, la tradición  dito; disminución notable de las ventas; dificul-
                  constitucional; tercer argumento, peligro de ma-  tades para colocar el saldo de la segunda serie de
                  nipular al pueblo en favor de su propia candida-  empréstitos de cien millones de dólares, con el
                  tura; cuatro, democracia es alternancia y no ree-  cual se financiaba al Gobierno; colapso del co-
                  lección, que es toda una frase muy bonita que  mercio de importación; merma sustancial de los
                  acuñó el doctor Henry Pease.                ingresos fiscales; desempleo creciente; alarma y
                                                              angustia generales; paralización de las obras pú-
                  Veamos primero el tema de la reelección, el tema  blicas, punto fuerte de Leguía, con el consiguiente
                  del argumento negativo como consecuencia de las  desempleo masivo; imposibilidad de continuar la
                  experiencias del presidente Leguía.         política hacendaria basada en empréstitos.

                  La oposición se muestra preocupada por la suer-  Todo eso aceleró el desgaste del gobierno y pre-
                  te que podría correr un Presidente reelecto in-  paró el ambiente para su caída, propiciada por el
                  mediatamente, y como ejemplo recuerda la tra-  Partido Civilista, por los ex leguiistas, por la agi-
                  gedia de Augusto B. Leguía. Se pretende esta-  tación universitaria y las campañas periodísti-
                  blecer una relación de causalidad entre la reelec-  cas, y por los amigos y parientes de la enorme
                  ción y el fracaso de un gobierno, el fracaso de un  cantidad de presos políticos y desterrados.
                  país.
                                                              La prueba de que la sublevación de Sánchez Ce-
                  Creo que aquí es importante revisar la historia.  rro, el 22 de agosto de 1930, fue fruto de feroz
                  No soy historiador, pero me he referido justamen-  crisis económica es el hecho de que cayeron pa-
                  te a ello para buscar justamente el contenido de  ralelamente —como se cayó en el país— en otros
                  los argumentos que podían haber sustentado esta  países también, como, en 1930, cayó Hernán
                  posición.                                   Siles, en Bolivia; Emilio Portes Gil, en México;
                                                              Hipólito Yrigoyen, en Argentina; y Washington
                                                              Luis Pereira de Souza, en Brasil; y, en 1931, Car-
                  He podido encontrar, revisando todos los libros,  los Ibáñez del Campo, en Chile.
                  especialmente los de Basadre, que el endiosa-
                  miento de Leguía comenzó a erosionarse con la  Esta ola de gobiernos derribados obedeció al des-
                  corrupción de sus allegados desde su primer go-  contento y desesperación generados por la tre-
                  bierno y con la paranoia que generó todo un sis-  menda crisis económica mundial. En consecuen-
                  tema de soplonería y espionaje.             cia, es insustentable asociar fracaso del gobierno
                                                              como consecuencia de la reelección; es una rela-
                  Esta erosión se agravó, sin duda, con la reforma  ción de causalidad falaz.
                  constitucional que aprobaba la reelegibilidad in-
                  definida y que fue promulgada por Ley 5857 de  El segundo argumento, la tradición constitucio-
                  1927. A su amparo, Leguía se presentó como can-  nal. Se dice que la posibilidad de reelección in-
                  didato único para su segunda reelección y tercer  mediata, aunque sea por un solo período, es to-
                  mandato en las elecciones del 4 y 5 de agosto de  talmente ajena a la tradición republicana y cons-
                  1929, para un nuevo período de cinco años. Debo  tituiría un salto al vacío, como mencionó el doc-
                  hacer notar que también en esa oportunidad se  tor Chirinos.
                  cerraron hasta los medios de comunicación; en-
                  tre ellos, el diario más conocido, El Comercio.  Si ése es el punto de vista, habría que recoger en



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