Page 52 - Debate Constitucional 1993 - Tomo I

Nueva Mayoría-Cambio 90. Bastará comparar el obstante —dijimos—, la dura realidad no pudo
proyecto que se publicó con el que estamos tra- ser moldeada por la ley.
yendo.
Un país nacido de la unión de las dos más gran-
Y que no se diga, como algunos abusivamente pre- des culturas de sus tiempos, España y el Imperio
tenden decir, que lograron arrancar algo a la ma- Incaico, ambas en su período de mayor expan-
yoría. A la mayoría no le van a arrancar nada, sión, no podían, en pocos años, dar a luz una nueva
porque ella tiene sus propios planteamientos, y nación, salvo extraordinarios casos de inmediato
basta votar para aprobar las cosas. mestizaje, como lo fue Garcilaso. Un parto histó-
rico tan importante demandaría muchas décadas
Pero cuando una mayoría es consciente, cuando aún hoy no terminadas; crecimos por tanto, en
no está politizada en el sentido de los intereses gran medida, con un solo nombre, pero con dos
menudos, es flexible, es racional, y hace lo que culturas.
nosotros hemos hecho: aceptar las contribucio-
nes. La mejor prueba de ello está en la publica- La lectura de nuestros antepasados fue parcial.
ción y en la comparación de lo que presentamos Unos entendieron que ya éramos una cultura
y en lo que se cumplió. europea, olvidando la realidad cultural y étnica
mayoritaria del país; otros quisieron regresar al
Sólo en una cosa no hemos cambiado, y es en lo esplendor del incanato, olvidando que la historia
que fue nuestra oferta electoral. Allí seremos nunca retrocede. Finalmente, una tercera corrien-
absolutamente inflexibles. Allí, el diálogo y la ra- te vio el Perú mestizo, pero también olvidó que
cionalidad no es con la oposición, porque nues- la fusión de las culturas y sus pueblos no se pro-
tro compromiso es con las bases. duce por el solo deseo del intérprete, sino des-
pués de un largo y lento proceso de fusión.
Por eso, lo que ofrecimos es lo que vamos a cum-
plir y está allí, en la Constitución. Ya en este pri- Demanda más tiempo cuanto más grandes son
mer capítulo se encontrarán cuatro o cinco de las culturas que se integran, ya que cada una tie-
las ofertas electorales que hicimos. Sobre eso no ne sus instrumentos de propia afirmación y de
hemos aceptado ninguna transacción; sobre eso, rechazo a lo ajeno. La demora, pues, en nuestra
que es lo fundamental, cumplimos con el pueblo. consolidación nacional no es, como algunos creen,
porque seamos un país irrealizable; sino más bien
Sobre lo demás habrá una amplia flexibilidad y el anuncio del nacimiento de una nación cultural-
apertura. Estamos aprendiendo de la oposición mente muy rica que, a sus miles de años de for-
con aportes sumamente valiosos; no todos lo son, mación aborigen, agrega medio millar de años de
pero tratamos de asimilarlos, comprendiendo que cultura occidental.
es necesario hacer una Constitución que recoja
las voluntades y criterios de todos los miembros Nuestro Perú no es, pues, una comunidad euro-
de este Parlamento. pea asentada en un territorio baldío ni una co-
munidad aborigen que debe expulsar a los ex-
Esto no quiere decir aceptar las imposiciones de tranjeros; ni siquiera es todavía la consolidación
la minoría, de ninguna manera; porque si la ma- de una con otra, sino más bien la hermosa y ex-
yoría está aquí, es porque ganó, porque el país traordinaria experiencia que nos ha tocado vivir,
pidió que se hicieran esas modificaciones. de continuar construyendo día a día aquel país
futuro de un auténtico mestizaje, creador de una
Por eso quisiera referirme brevemente a las pa- nueva cultura, continente de los más grandes
labras con las que iniciamos los trabajos consti- valores de la cultura indígena y occidental.
tucionales. Se trata de un par de párrafos que
permiten advertir cómo la Presidencia de esta Pero la realidad y la experiencia nos exigen com-
Comisión ha encauzado los trabajos. prender que el Perú todavía es una sociedad plu-
ral, y que lo seguirá siendo durante toda nuestra
Voy a leer textualmente lo que dijimos en ese vida, la de nuestros hijos y aún la de nuestros
momento: Una vez más en nuestra historia los nietos. Tal vez los hijos de éstos alcancen a vivir
peruanos nos detenemos para revisar las bases en lo que hoy todavía es nuestro legítimo sueño:
que sustentan nuestra sociedad. Los anteriores un país mestizo, socialmente integrado y con per-
intentos no fueron vanos, todos ellos convocaron sonalidad definida.
las mejores intenciones y siempre apuntaron a
consolidar una patria grande, justa y libre; por- Para que esto sea así, nosotros tenemos que cum-
que nosotros, señor Presidente, no estamos in- plir el papel que el destino nos ha encomendado,
ventando un nuevo Perú, estamos recogiendo la canalizar y fortalecer lo que nuestros padres
historia que dejaron nuestros padres, nuestros quisieron: una patria sin amos, un país justo, una
abuelos; es decir, somos una continuidad. No sociedad pacífica. Para lograrlo debemos partir

28