Page 53 - Vida y Obra de Toribio Rodriguez de Mendoza - Vol-1
P. 53

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             Vida y obra de Toribio Rodríguez de Mendoza
                    Esta circunstancia verdaderamente, le da un realze muy estimable, por
            que siendo en estos Países (como juiciosamente, observan los Autores de el
            Plan) tan necesarios los Ministerios que dependen de esta ciencia es convenien-
            te a la Religión y al Estado, que los Jovenes no tomen sus nociones superficial-
            mente, y por un estudio privado, sino que beban sus principios en manantiales
            puros y limpios para que no se infesten de las opiniones baxas y peligrosas, que
            exparcieron algunos Casuistas, principalmte. desde el siglo XVI gobernados
            por principios arbitrarios, y sin poner cuidado en apoyar sus doctrinas en la
            tradición, en los SS. PP. o Concilios, pr. lo que han merecido la justa censura
            de los sabios, atreviendose Piquer a decir en el Cap° 15 de su Lógica, que mas
            parecían libros para Barberías que para Yglesia: y Mabillon qe. mas pronto se
            podían sacar de los oficios de Cicerón qe. de leer algunas de estas sumas.
                    Para preferir la obra grande de Duhamel no es razón de congruencia
            de pequeño momento al hallarse adoptada por el Sor. Cano Obpo. de Segorbe
            en un methodo de estudios monásticos: y mas habiendo sido aprobado por el
            Consejo con las expresiones mas honoríficas azia este respetable Prelado, or-
            denado se observase en las Provincias de el orn. de la SSma. Trinidad de Cas-
            tilla, Andalucía y Aragon, según nos instruye Dn. Juan Sempere en el tomo 2°
            de su Biblioteca Española.
                    A fin de Fixar en los Colegiales las nociones que vayan adquiriendo,
            asi en la Theologia como en las demas facultades convendría qe. al tpo. qe. las
            estudian hubiesen dos dias a la semana sus respectivas conferencias pr. la no-
            che que traxesen estudiadas algunas ojas de lo atrasado, y que al Rexte. o Mtro.
            q. las presidiese les preguntase a su arbitrio por espacio de media hora, y por
            otra media continuase la practica qe. se observa de defender un colegial por
            turno la conclusion, que se le ha señalado por el methodo de escuela, pues por
            este medio se acostumbrarían a hablar en público, y a reducir sus principios a
            raciocinios ajustados a las Leyes de una buena Lógica.
                    El uso de el silogismo en esta clase de exercicios escolásticos spre. qe.
            se hace con sobriedad y moderación, y no con el calor y arrebato, que inspi-
            ra el espíritu de partido, es sumamente oportuno, para exponer con mayor
            vivesa, fuerza y claridad las verdades que se pretenden demostrar. Por otra
            parte las disputas, que se tienen con ánimo dócil y dirigido únicamente a la
            averiguación de la verdad, contribuien admirablemente a ilustrarla, y son la
            piedra de tope en que se descubre la falacia de los sofismas capciosos, con que
            se pretende obscurecerla.



                                                52
   48   49   50   51   52   53   54   55   56   57   58