Page 223 - Vida y Obra de José Baquijano y Carrillo - Vol-1
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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             Vida y obra de José Baquíjano y Carrillo
            porque en la aduana se presentan las facturas, y ni ellas, ni los rótulos de las
            obras concuerdan con su interior, porque la malicia ha discurrido las medidas
            de desfigurar con los títulos de las obras más santas y permitidas, las cuales
            se conocen prohibidas; y este fraude, difícil de averiguar en aquella oficina
            por falta del tiempo y conocimientos necesarios, se cortará en la Inquisición
            donde concurre uno y otro; y la asistencia del señor ministro servirá para los
            libros en que no hallando reparo aquel tribunal, puedan tenerlo por razones
            de estado y política, que haya para que no corran, y el método de reducir a la
            práctica, el que he propuesto, será el que el administrador de la aduana separe
            cuantos libros entren, y después de evacuarse lo correspondiente a su oficina y
            de entregarse el resto de la carga y equipaje a el interesado, me pase noticia, y
            las facturas de aquellos, para que dándola yo a vuestra excelencia disponga su
            traslación a la Inquisición y el nombramiento de el señor ministro, y para que
            nadie alegue ignorancia, ni interprete la detención nacida de la Aduana podrá
            publicarse por bando, y a el administrador haré yo las prevenciones oportunas
            según lo que vuestra excelencia determine. Si con esta u otras precauciones
            pudiera también en los puertos de la Península impedirse a el tiempo de el
            embarco, de semejantes libros sería duplicada, la seguridad, y no alcanzo otra
            que poder aquí ejecutar en cumplimiento de las soberanas intenciones que
            dejo así por mi parte satisfechas, y añado que por no saber haya fuera de esta
            capital imprentas he hablado únicamente de ella.
                    Dios guarde a vuestra excelencia muchos años.
                    Lima, febrero 3 de 1786.
                    Excelentísimo señor, besa las manos de vuestra excelencia su más
            atento y seguro servidor.
                                  Jorge  Escobedo.
                    Excelentísimo señor virrey don Teodoro de Croix.


                              FUENTE: A.G.I. Lima, leg. 674. Expediente cit. fs. 3-5v.
















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