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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             La rebelión de Túpac Amaru II
            canones sagrados, los conciliares estatutos y pontificios decretos, han reco-
            mendado eficazmente a los prelados eclesiasticos, tan importante objeto, en
            especial para los monasterios de monjas mas expuestas a la seduccion y a de-
            clinar de su primordial ynstituto. A la verdad ninguna cosa debe con mas es-
            mero ocupar toda la atencion de nuestro paternal zelo, que quanto pertenece
            al regimen y buen govierno de ellos, estos son segun un capitulo del derecho
            canonico (a) (Al margen: (a) titulo treinta y uno de estatut Monach capitulo
            tres) la plantacion santa y viña escogida del Señor de Sebasth, que con el riego
            fecundo de la gracia abundan en el exercicio de las virtudes y dan copiosos
            frutos de santidad en el desierto de este mundo; las vírgenes esposas que los
            abitan son la porcion mas ilustre del rebaño de Jesu Christo (b) (Al margen:
            (b) Bened. XIV veintinueve aid de Nonialibus que ilustrior patio gregis. xto.
            merito nuncupantu) que elebando hasta el cielo el clamor de sus oraciones
            penetran el trono de Dios y la magestad se hace propicia a sus ruegos, porque
            los presentan con una alma pura y un corazon enteramente desprendido de
            los afectos terrenos, su estudio y ocupaciones no son otras que las de adelantar
            en la religiosa perfeccion y consejos evangelicos, a que se han obligado por
            estrechos solemnes votos; este es el carácter que las separa del siglo por medio
            del mas eroico sacrificio; pero como es tan general la humana corrupcion, y la
            naturaleza propensa al mal en todo tiempo, llega muchas veces con sacrílega
            deprabacion a imbadir hasta el sagrado de los claustros religiosos lo que re-
            flexionando el Santo Concilio de Trento de la sesion veinte y cinco capitulo
            primero de regularibus para que se instaure la antigua regular observancia
            donde se huviesen introducido algunos desordenes y persecevere ilesa, donde
            se mantenga el fervor primitivo a ordenado a los superiores pongan toda dili-
            gencia, e imbijilen para que se guarden sus prescriptas reglas, porque siendo
            estas, como el fundamento de su espiritual estructura, es necesaria que en su
            transgresion se arruine el monastico edificio; a este fin propone, como medio
            el mas oportuno, el de las visitas de estos conventos, para que se corrija y en-
            miende lo que exigiere remedio (d) (Al margen: (d) Constit. Bonif. VIII que
            incipit Periculoso citata a Trid. senio veinte y cinco de regular capitulo cinco)
            pero hallandonos, en prosecucion de la que iniciamos en nuestro ingreso al
            obispado, visitando actualmente nuestra Yglesia Cathedral y Parroquias cuia
            ocupacion nos es impedimento para actuarla, con la prontitud que deseamos,
            nos ha parecido necesario anticipar por este edicto varias providencias que
            despues de un maduro acuerdo e instruccion practica, hemos creído mui



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