Page 182 - La Rebelión de Túpac Amaru II - 4
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Volumen 4
Conclusión de la rebelión
los de Surimana les consta; y más dice esta declarante que Juan Thupa Amaro
es de la misma figura de su padre Miguel, en el color y señales de la cara; y
que esta es la verdad de lo que sabe, so cargo del juramento que fecho tiene; y
leída que le fué de principo a fin, y interpretándola en su idioma índica por el
intérprete, dijo: que si se afirmaba y ratificaba en ella; y es de sesenta y cinco
años al parecer; y que no le tocan las generales de la Ley; y para que conste
lo firmé, y por la declarante el intérprete nombrado, con los testigos que se
hallaron presentes, actuando con ellos a falta de escribano.- Juan Ascencio de
Zalas.- Hilario Yáñez.- Ildefonso Aguilar.- Mariano Manuel de Zalas.- Miguel
de la Torre.- Hilario Silba.
Cuzco y Junio 24 de 1781.- Habiéndose recibido en el dia la sumaria,
que se mande agregar a estos autos; prosígase la confesión con arreglo a lo
que resulta de ella, y fecho llévense al Solicitador Fiscal nombrado.- Manuel
Espinarete López.
En dicha ciudad, el enunciado día, mes y años, en prosecución de la antece-
dente confesión, comparecio Juan Túpamaro; y, recibido juramento, fué preguntado
con qué motivo y por qué estuvo escondido en un cerro, términos de Tungasuca,
con su muger y madre, y de qué tenía una talega con ciento treinta y cuatro pesos,y
otra con pólvora y balas, dice: no estuve escondido, sino que públicamente vivía en
una estancia obejería, para cuidar una chacarita de papas; que la talega del dinero la
tenía, porque Diego Túpamaro se la dió para llevarla a Joseph Gabriel, a quien se la
fué a entregar, y le dijo se la retuviese, por eso la tenía; que la de pólvora y balas era
porque cuidaba la fiesta del Sacramento, y compró para ello un poco de pólvora, y
sólo tenía unas cuatro balas que habían encontrado, y responde.
Hízosele cargo, cómo dice no estaba escondido en un agujero de un cerro
junto a Tungasuca, cuando los testigos así lo declararon, dice es falso el cargo, y
responde.
Preguntósele si sirvió en el obraje de Pomacanche, cuando el rebelde se hizo
dueño de él, cuidando con gran perspicacia, y si estuvo con cuidado en Tinta la no-
che que se huyó el rebelde, dice: que una noche quedó cuidando el obraje, nada mas:
que lo demás es falso, y responde.
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