Page 196 - La Rebelión de Tupac Amaru Vol 1
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Volumen 1
Relación de la fundación de la Real Audiencia del Cuzco en 1788
ojos que influyen favores, una alegria natural que se esparce en cuantos la
consideran, un amor a la Nación que es el fiador de sus properidades, una
fertilidad que le asegura la suerte de adorar siempre sus frutos en el Trono.
Estas dotes con el util mixto que hazen a las de su Real Consorte, aquie-
tan y tranquilizan aun las mas ambiciosas ansias de sus Vasallos. Regocíjese
pues V.M. del ajustado enlaze que tiene a todos aspectos con el Rey N. Señor,
como se regocijan todos sus Reynos de ver a su frente un Joven Monarca que
asciende al Trono en una edad que ha excedido ya la raya de la infancia, y está
mui distante de tocar las lindes de la humana deficiencia.
Las virtudes christianas fueron los primeros arrullos de su niñez: las
instrucciones de una Madre Heroina fueron el alimento de la razon: los exem-
plos de un Padre justo, fueron los empeños de su adolescencia. En su Juventud
no se han visto años dignos de que un velo los remueva de los ojos. Los cuida-
dos del hombre privado, han estado en alianza con los del hombre publico; y
el amor a sus subditos, que no han puesto intervalo entre conocerlo, amarlo, y
respetarlo, ha hecho el mobil unico de sus operaciones.
Asi su sangre le dara lecciones domesticas de grandeza. La Corte que
habita le sera como un Templo de honor, en que vera colocadas las imagenes
de sus Progenitores llenos de la gloria de sus Proesas, y como que lo excitan a
igualarlas y aun a excederlas. La historia le ofrecera grandes acciones con tes-
tigos irreprehensibles en los mismos a cuyos Derechos sucede. Los Soberanos
que hoy ocupan los Tronos mas respetables de la Europa, con cuya elevada
Alcuña tiene incontestable entroncamiento, se le propondran como atentos
espectadores de lo que hubiere de obrar desde su solio. Los Pueblos que go-
bierna, y cuya afeccion respetuosa ha conquistado ya por esa afabilidad tan
rara, le daran en su lealtad la prenda mas firme de su sinceridad.
Que impulsos tan vivos para ser el mayor Rey del mundo por su go-
bierno, como lo es por su Dignidad! Que motivos tan poderosos para no aspi-
rar a esas estatuas que labra la adulacion, sino solo a esotras que costea en los
pechos del Vasallage la beneficencia. Creemos que no será preciso aguardar
los sufragios de la Posteridad indiferente, para ratificar el ventajoso concepto
que desde ahora formarnos todos de sus dotes; y que los momentos de gra-
titud que desde su edad se erigiran a su merito, estaran siempre indemnes, y
seguros de que los tiempos venideros los demuelen como a idolos que fabrica
y eleva la lisonja.
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