Page 711 - Debate Constitucional 1993 - Tomo II

La señora SALGADO RUBIANES DE PARE- borozo, con patriotismo, con algarabía, unas Fies-
DES (NM-C90).— Señor Presidente: Qué lásti- tas Patrias como mucho antes no se festejaban.
ma que a estas alturas, a estas horas del debate,
que se había mostrado alturado, se venga a dis- Hay cambios fundamentales. Y no me voy a refe-
torsionar por la desesperación de ciertos colegas rir a los grandes cambios de estructura que está
congresistas. llevando a cabo el Gobierno; pero sí me voy a
referir, señor Presidente, a todas esas ventajas
Y es una lástima, porque el día de ayer se dio una que tienen, casualmente, esos pueblos olvidados
gran muestra de lo que puede ser un debate polí- de los que tantos congresistas hablan ahora, de
tico alturado, y creo que el país pudo seguir por la lo que tanto argumentaran partidos políticos, y
radio y por la televisión las manifestaciones y los de los que nunca hicieron nada.
argumentos de los diferentes congresistas.
Hoy hay carreteras limpias, hay trochas que se
Yo supongo que es porque se acerca la hora de abren, hay posibilidades de futuro. Hoy se re-
votar y hay desesperación, porque se está llegan- parte semillas y fertilizantes a la mayoría de cam-
do a confirmar que nosotros solamente hemos pesinos pobres.
venido a expresar la opinión de ese pueblo que
nos depositó su voto y su confianza a esta mayo- Sabemos que la pobreza de este país no se va a
ría de los cuarenta y cuatro, y que creo que hasta resolver ni siquiera en diez o en quince años, pero
ahora no lo hemos defraudado. se está trabajando por quienes más lo necesitan;
y, casualmente, quienes más lo necesitan son los
Señor, yo respeto todas las manifestaciones y opi- que están reconociendo el trabajo del presidente
niones de la minoría, y sé que a estas horas no- Fujimori.
sotros no vamos a pretender cambiarles de opi-
nión ni hacer que se pongan en nuestro bando. Entonces, yo me pregunto: ¿por qué no les va-
Lo único que queremos decirles y precisarles es mos a dar la oportunidad de tener como una op-
que también respeten nuestra posición, respe- ción más al presidente Fujimori dentro de esa
ten nuestra mayoría y respeten el hecho de que larga lista, donde pueden estar ilustres represen-
en nosotros se encuentran las voluntades, los sen- tantes que hoy día están aquí? ¿Por qué no dar
timientos de muchos peruanos. al pueblo la oportunidad de que tenga una op-
ción adicional y pueda elegir al que hasta ahora
Señor, cuando escuchaba yo en la mañana al se- ha conducido con acierto a este país caótico?
ñor Juan Guillermo Carpio, que es un miembro
de la minoría, que no votó ni votará de repente Señor Presidente, yo creo que las mezquindades
por Fujimori, yo escuchaba en su expresión la tienen que quedar a un lado; y la decisión del
expresión de miles de peruanos que jamás cono- pueblo, a pesar que se diga que son necedades, a
cieron al presidente Fujimori ni confiaron en él pesar que se diga que tienen que equivocarse otra
y, es más, votaron por diferentes candidatos, y vez, son las que van a decidir al final si lo reeli-
hoy reconocen sin mezquindad sus obras. gen o no lo reeligen. El pueblo es el único que,
con su voto, va a decir si Fujimori vuelve a ser
Yo no voy a alargar el debate. Solamente quiero presidente o no vuelve a ser presidente.
precisar de que este país sí ha cambiado. Si ha-
cen las comparaciones del 90 a la fecha, nadie Señor Presidente...
podrá negar que aquí existe otra faz, que aquí se
respira otro ambiente. El señor PRESIDENTE.— Perdone, doctora
Luz Salgado.
Quienes lamentablemente no han viajado a pro-
vincias no pueden constatar, señor Presidente, Su tiempo ha concluido. Se lo quiero hacer saber
esta tremenda diferencia. Cuando nosotros en el simplemente por motivos de control, perfecto.
90 íbamos a Ayacucho o a Apurímac, teníamos
que recluirnos en los hoteles a las seis de la tar- La señor SALGADO RUBIANES DE PARE-
de, porque ya no se podía caminar más. Cuando DES (NM-C90).— Concluyo, señor Presidente,
íbamos a diferentes provincias, teníamos que porque yo creo que ya se han dicho todos los ar-
caminar con dos o tres personas a nuestro costa- gumentos. Lo único que quiero recalcar es que
do, porque temíamos por nuestras vidas. nosotros creemos que este proceso de pacifica-
ción tiene que continuar; creemos que el sacrifi-
Hoy no es así, y la prueba más palpable la tienen cio que ha hecho el pueblo peruano para esta re-
cuando los miles de peruanos han festejado con al- construcción nacional no se puede poner en peli-

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