Page 338 - La Rebelión de Huanuco - vol 3
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Volumen  3
                        Autos seguidos sobre el descubrimiento de los autores de la rebelión de Huánuco - Segunda parte
                    Preguntado, que partido há seguido durante la Rebolucion, que decir,
            si ha sido de la causa del Rey, ó de la de los alzados dixo: Que lexos de abrazar
            el partido de los Sediciosos, há contribuido con el mas vivo esfuerzo al sostén,
            y triunfo de los derechos legitimos de Su Soberano, y responde.
                    Recomvenido como falta á la verdad en semejante acercion, quando
            en su causa se vé una esquela cuyo tenor comvence á la evidencia que él in-
            tentó concurrir por su parte, y aun con la de sus Reclutas al fomento de las
            empresas Rebolucionarias; manifestandosela en el acto á efecto de que la re-
            conociese, diga la verdad vaxo de apercivimiento dixo: Que la esquela que se
            le manifiesta, és suya y firmada de su puño, y letra, y la misma que dirigió á
            Don Juan Jose Castillo como a General de los Yndios Alzados; y que aunque és
            verdad que su contenido indica animo deliverado de concurrir á la subleva-
            cion, pero que ésto no lo executó, si no por sumo temor al prenotado Castillo
            que lo amenasó de muerte por medio de sus Yndios, á quienes los envió al
            Cuartel donde se hallava el confesante la vispera de la indicada accion en el
            Asiento de Ambo contra los Voluntarios del Cerro donde le intimaron que si
            no coperavá á sus designios le quitarian la vida, y responde.
                    Recomvenido, que és figurado, y falso el motivo de temor que alega
            por quanta del tenor de su citada esquela se deduce claramente que lexos de
            haver tomado un éfugio para evadirse del apremio, y coaccion, antes bien se
            franquea, y comvida para servír juntamente con sus Reclutas en dicha cri-
            minal expedicion; avisando del numero de aquellos, y defiriendose á quanto
            disponga el memorado General; diga la verdad, y no falte al juramento que há
            prestado con apercivimiento de que será apremiado dixo: Que aunque escri-
            vió la esquela en los terminos que aparecen, sin embargo su animo no fue da-
            ñado, y que solamente trató por medio de ella salvar su individuo y responde.
                    Recomvenido, que igualmente és falso el que lo huviese coactado el
            General Castillo por medio de los Yndios para que sirviese con sus Reclu-
            tas en la referida expedicion, respecto á que de las mismas expreciones de
            la esquela se colige todo lo contrario á aquel, que si fuese cierta la violencia
            no huviese dicho: Vuestra Merced: Puede disponer de los diez y siete Reclutas
            si acaso lo halla por comveniente el que vayamos inclusos con los demas de la
            Patria hasta el Pueblo de Ambo; lo que persuade no haver havido preceden-
            te recomvencion, ni incitativa, si no una prestacion voluntaria, y obsequiosa
            dixo: Que no obstante que conoce la fuerza de la reflexion que se le hace, con
            todo repite, y asegura que la tal esquela no fue dictada sino del temor, y deseo



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