Page 207 - La Rebelión de Huánuco. Vol 1
P. 207

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             La rebelión de Huánuco de 1812
            dijese «Señor Cura salvese Usted la Doctrina de Pallanchacra está alzada tie-
            nen 40 fusiles que no han querido traer aquí, un barril de polvora, y un cajon
            de cartuchos, la Doctrina de Usted no tarda, y Usted es la primera víctima por
            europeo, y por haver prestado auxilios a los europeos, y las Armas del Rey».
            No dejé de creerlo, pero no lo di á conocer. A toque de campana llamé a mi
            gente y congregada en mi patio le hable asi «Hjos, yo entré en la Doctrina con
            repiques de campanas, y con gusto vuestro al medio dia, y no es decente salga
            de ella en la media noche como un ladron. Los Curas que se hán huido de sus
            Doctrinas no han tenido satisfaccion de sus feligreses, yo la tengo de vosotros,
            asi hablar claro si hay alguno descontento conmigo levante el dedo, y saldré
            de la Doctrina ahora mismo». Yo vi llorar a mis feligreses, y 7 Alcaldes de mis
            Pueblos que me oyan, gritaron Usted con nosotros, y nosotros con Usted. Les
            hice repetir la oferta, y mande que todos se acostasen, exepto los del Pueblo
            de Chinchan a cuyo Alcalde y jente mandé a la una de la noche con mulas al
            obraje de San Rafael a que sacasen los fusiles que estavan alli, mandandoles
            que si resistian la entrega usasen de la fuerza. Fueron, y yo sali con solo mi
            ynter a rondar el Pueblo para impedir Juntas. Amanecí en la calle, y por la
            mañana vi venir los fusiles, y ir llegando succesivamente los europeos derro-
            tados en Ambo. Guardé la polvora y municiones en mi quarto, y a las 8 del
            dia supe que llegava la Tropa, y Yntendente en aquel dia. Con esta nueva que
            comuniqué por propios a la Doctrina de Pallanchacra pidiendo mulas para el
            transporte, todo tomó un aspecto sereno. Los Alcaldes de Pallanchacra apare-
            cieron y haviendo empezado a llegar Tropas, todo calmó. Si no llegan en 2 dias
            estos socorros todo se pierde: Demos gracias a Dios de que no huvo tiempo
            para que los insurgentes de Huanuco no creyeron tan pronto el socorro.
                    Dia 27, y 28. Savemos que los Pueblos insurgentes de Huanuco, y Pa-
            nataguas van viniendo a la Ciudad a presentarse al Yntendente, que siguen las
            prisiones, pero de ninguno de los de la Junta, y si de varios cavezillas de los
            Pueblos a quienes van denunciando, y entregando los mismos yndios. Que los
            de Panataguas havian ofrecido entregar al Regidor de Huanuco Castillo que
            estava profugo con otros en aquellos montes, a cuyo fin salió de Huanuco una
            Partida con los yndios. Ellos lo entregaran. Sigue la insurreccion de Huama-
            lies, y se asegura que los mestizos de alli están opuestos a los yndios, y se están
            matando. En Huanuco se están entregando robos, y a pesar de haver mas de
            150 presos, no se castiga uno. Ya he dicho que el Yntendente es mui blando, y





                                               206
   202   203   204   205   206   207   208   209   210   211   212