Page 388 - La Rebelión de Túpac Amaru II - 4
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Volumen  4
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            sus chocos de perlas sarcillos de diamantes y otras alajas de valor contenidas
            en una cajuela y una fuente de plata que le trageron los yndios del mineral de
            Patacamaia pertenesientes a dicho Don Bartolome Arzabe que tambien exis-
            tian en aquella ocasion en el alto de San Pedro. Que en el Pueblo de Chupe de
            los Yungas hizo matar a una muger que havia acecinado a su marido y procu-
            raba hacer lo mismo con el testigo que vio el omicidio sin que hubiese muerto
            a otra persona en todos los yungas.
                    Preguntado donde estan y en que poder los caudales que han robado y
            echo robar en el discurso de la sublevacion que ha fomentado asi de los espa-
            ñoles como de las Iglecias pues es constante que ni aun los Basos Sagrados ni
            ornamentos ha reserbado su ambicion y del mismo modo exprese que tantos
            miles de pesos ha percibido de los frutos de las haziendas del Rio abajo de la
            Paz. Responde que no tiene caudal ninguno en su poder ni en el ageno pues
            toda la porcion que retubo en el alto de la Paz la entregaron los yndios de Pu-
            carani al Señor Don Ignacio Flores y el resto que le remitieron de Yungas Me-
            capaca y Caracato le quitó Tituatauchi; y aunque después pudo persevir qua-
            tro zurronesitos chicos digo seis de ziento cincuenta pesos los dos de ellos le
            robaron en Chacaltaia, como ya tiene confesado, otros dos havian echo pasar
            al Pueblo de Sorata a entregar a Andres Topaamaro como tambien los otros
            dos y asi no tiene caudal alguno, pues lo poco que le trajeron de Copacabana,
            Yungas, y Caracoto, le allaron al tiempo de su pricion en esta forma: seis mil
            pesos en seis talegos en costales, plata labrada y bestidos que estaban en tres
            petacas y una carga de coca sencilla, con catorze mulas: que una custodia a
            su entender dorada y un caliz le trajeron los yndios de Callana y quando los
            yndios fueron derrotados en los altos de la Paz le dijeron que ambas alajas
            sagradas las trasladaron al pueblo de Pucarani que tres casullas con sus Albas
            llevaron los yndios de Achocalla a dicho alto de la Paz y cree que la restituirian
            a su Yglecia y lo mismo aria el licenciado Don Ysidro Escobar con otra Casu-
            lla que llevó a dicho alto, que al alto de Pampajasi solo hizo llevar una casulla
            y que si se allaron otras mas serian las que remitió Miguel Bastidas quando se
            retiró para este santuario: Que a la Soberana ymagen de nuestra Señora de las
            Letanias la extrajo de su yglesia y condujo al galpon que tenia dispuesto en el
            alto de la Paz, y despues de mas de un mes hizo la llevasen a su Santuario: Que
            a la primera guerra que tubo en Sicasica con los españoles hizo llevar a dicha
            Santa Ymagen con un Sacristan de Caquiabiri y la bolbio a traer despues de
            la Victoria a dicho alto de la Paz, y de ay la remitió a su santuario como tiene



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