Page 428 - La Revelión de Tupac Amaru II - Vol. III
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Volumen 3
Inicio de la rebelión
(Al margen: Otra).
El reverendo padre Prefecto de Betlemitas dijo, que obedecía y obede-
ció la superior orden de su señoría ilustrísima y lo firmó de que doy fe.— Fray
Manuel de la Encarnación.— Isidro Cortés.
(Al margen: Otra).
En consecuencia del auto antecedente mandado por su señoría ilustrí-
sima, mi Amo, notifiqué a la reverenda madre Priora del Monasterio de Santa
Teresa, quien dijo que obedecía y obedecía y para que conste lo firmó en la
puerta de dicho monasterio, de que doy fe.— María Antonia de San Ignacio,
Priora.— Isidro Cortés.
(Al margen: Otra).
En conformidad de lo arriba mandado por su señoría ilustrísima no-
tifiqué a la reverenda madre Secretaria, en ausencia de la Priora y dijo que
obedecía sin excusa alguna, y lo firmó de que doy fe.— Madre Dominga de los
Dolores, Secretaria.— Isidro Cortés.
(Al margen: Otra).
Hice saber el auto antecedente de su señoría ilustrísima, mi Amo a la
reverenda madre Abadesa del Monasterio de Santa Clara y dijo que con exac-
titud se cumpliría todo lo mandado por dicho señor, y lo firmó en la puerta
de dicho su monasterio a horas de las tres de la tarde de dicho día, de que doy
fe.— Sor Rosa Venero, Abadesa.— Ante mí Isidro Cortés.
(Al margen: Otra).
Habiendo notificado a la reveranda madre Prepósita de las Nazarenas,
el auto de su señoría ilustrísima dijo, que obedecía y obedeció y lo firmó de
que doy fe.— Catalina de Santo Domingo.— Ante mí Cortés.
(Al margen: Otra).
En conformidad del auto antecedente mandado por mi Señor y Amo,
el señor Obispo, notifiqué al licenciado don Cristobal Reynoso, Ayudante de
Belén en ausencia de su cura quien dijo, que obedecía y obedeció y para que
conste lo ausente por diligencia, como a horas de las cinco de la tarde y de ello
doy fe.— Cristobal Reynoso.— Ante mí Isidro Cortés.
(Al margen: Otra).
En cumplimiento de lo mandado por su señoría ilustrísima notifiqué
el auto de la vuelta al señor cura de la parroquia de Santa Ana, quien dijo que
con la mayor exactitud cumpliría todo lo mandado y por ser de verdad lo fir-
mó de que doy fe.— Juan Tomás Pinelo.— Ante mí Isidro Cortés.
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