Page 102 - La Rebelión de Huanuco - vol 3
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Volumen 3
Autos seguidos sobre el descubrimiento de los autores de la rebelión de Huánuco - Segunda parte
A Vuestra Señoría pido, y suplico se sirba mandar hacer en todo, como
solicito, ó lo que estime mas de justicia, y que las diligencias, que en la materia
se obren se me entreguen originales, para los efectos que me convengan, etc.
José de Binía (Rubricado).
En execución del auto de la buelta, y en el día de su fecha el Defenzor
nombrado, presentó ante Su Señoría al Sargento Mayor Don Manuel Talan-
cha, de quien por ante mi el presente Escribano (de quien) recivió juramento
que lo hizo por Dios nuestro Señor y una Señal de Cruz bajo del que ofreció
decir verdad de que supiere, y fuere preguntado, y siendo examinado al tenor
del Ynterrogatorio contenido en su pedimento Dijo:
(Al margen)
A la 1a. pregunta dijo: Que es cierto y constante todo lo contenido en
ella y responde.
(Al margen)
A la 2a. dijo: Que igualmente es cierta y responde.
(Al margen) 3a.
A la tercera dijo: Que la ignora, haviendo solamente visto el declarante
a Don José Nalvarte de regreso de dicha espedición en el Puente del Tingo, de
donde vinieron juntos a esta Ciudad en la que haviendo oido ambos repiques de
Campanas, por la victoria, se le expresó el citado Nalvarte al declarante en estos
términos; estos repiques han de amargar algún día a los insurgentes y responde.
(Al margen) 4a.
A la quarta dijo: Que la ignora y responde.
(Al margen) 5a.
A la quinta dijo: que reproduce lo que tiene expuesto en su tercer respuesta.
(Al margen) 6a.
A la sexta y última dijo: que quanto sabe el declarante aserca de la
conducta del referido Nalvarte, en la rebelión acaecida por haverlo visto, es,
que el Lunes diez y siete del ppdo. en la recluta forsosa que los Yndios rebel-
des hicieron en esta Ciudad de algunos vecinos de ella, advirtió el Declarante
haver obligado José Rodrígues al enunciado Nalvarte, para que se dirigiese
en consorcio de los conspirados al Haziento de Ambo, donde se hallaban las
Tropas del Rey; y en efecto salió de esta Ciudad; pero que luego que halló,
oportunidad, se ocultó en el paraje de Huancachupa, de donde se vino á ella,
refugiándose inmediatamente en la Yglecia mayor, de miedo que le hicieren
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