Page 351 - La Rebelión de Huánuco. Vol 1
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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
La rebelión de Huánuco de 1812
Señor Yntendente propio y el referido Coronel de estas Milicias = Sin em-
bargo, pocos días antes de la salida del correo predicho, marcharon de aquí
sien hombres con el Señor Governador, armas de trecientos de estas Milicias
diciplinadas, sin contar con otros de las urbanas. Frescamente y después de
mi prebención han salido tres días antes de esta fecha otros sien milicianos
de este Regimiento diciplinado: aunque recombenido su Jefe, me asegura han
quedado como trecientos; también es cierto que los más son ausentes en sus
destinos: Por otro lado las armas que vinieron de esa Capital a esta, se han pa-
sado a los puntos de Panataguas, Huánuco, y Huamalíes, y de este modo esta-
mos, quedando muy pocas, indefensos, y em bisible riesgo: Todos lo conocen,
y entre ellos los partidarios ocultos de los ynsurgentes, y será consiguiente su
efecto; sino se subiene en acortar este cáncer = Yo no seso en quanto mis adbi-
trios alcansen de tomar precauciones, y valiéndose de abisos saludables por el
Ylustre Ayuntamiento, y Jefe Militar: No paran las Patrullas. Ayer é promulga-
do Bando para que todos reconoscan Capitán: Poco antes se me precenciaron
como sinquenta del Cuerpo Político, y se anuncia llegarán a setenta, liberales,
sin pencionar la Real Hacienda, con la mayor energía a formar una Compañía
de Distinguidos eligiendo por su Capitán a Don Alonzo Caviedes, europeo
de esta vecindad en quien también se ha puesto este Cabildo. Quedo tratan-
do con el mayor vigor este interesante asunto: Su adelantamiento con lo más
que ocurra elevaré a Vuestra Excelencia oportunamente: De su paternal amor
espera este vecindario se proporcionen mejores medios de defensa, aumen-
tándose los aprestos de guerra, y brazos auxiliares, escasos en tal grado que en
la actualidad me balgo de los mismos yndios sospechosos por no tener una
mera ordenansa, espuesta mi propia vida: con todo como buen patriota, y por
virtud de mi empleo, no desfallesco, cumpliendo con esponer a Vuestra Exce-
lencia quanto me parece combeniente en resguardo de los sagrados derechos
que interbienen, y que exigen el mas pronto, y eficas aucilio = Dios guarde a
Vuestra Excelencia muchos años, Tarma, y Abril seis de mil ochocientos doce
= Ygnacio Valdivieso = Señor Excelentísimo Don Jose Abascal, Virrey Gover-
nador y Capitán General de este Reyno del Perú.=
Es fiel copia de su original. Fecho idem.
Valdivieso (Rubricado).
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