Page 32 - La Rebelión de Huánuco. Vol 1
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Volumen 1
Prólogo a la primera edición
HEURÍSTICA DE LA INVESTIGACIÓN
De la somera reseña bibliográfica sobre la documentación del movi-
miento revolucionario de 1812, es fácil verificar que los diversos expedientes
de los procesos han estado sujetos a un inexplicable destino adverso y que,
aún en muy cercanas fechas, continuaron desapareciendo piezas importantes
de los mismos. Es interesante anotar que en los propios días de la tramitación
de las causas por los saqueos de la ciudad de Huánuco, el meticuloso D. José
González de Prada, temía la pérdida de los cuadernos de embargos, de los
cuales «no quedaba antecedente en la Intendencia» al elevarse ante la Real
Audiencia.
No le asistía en verdad plena razón al Dr. Eguiguren al afirmar, en
1912, que no existían ya los presuntos seis cuadernos de los autos de la in-
surrección de Huánuco, quedando sólo uno de los correspondientes a la de
Huamalíes; como tampoco, en 1959, al menospreciar la documentación sobre
la materia que se conserva en la Biblioteca Nacional del Perú. Empero, es evi-
dente que algunos de los cuadernos de los autos principales y de las sumarias
no figuran en los repositorios conocidos, públicos y privados.
Al iniciar esta investigación no nos guiaba sino una finalidad inmedia-
ta, enderezada a destacar la participación peruana en la etapa precursora de la
Emancipación; y, urgidos por la razón del limitado tiempo señalado a la tarea,
fue nuestro propósito concretarnos a la edición de un corto número de las
fuentes básicas y de fácil acceso. No empece, el interés del tema y las propias
dificultades en el hallazgo y acopio del material, incitaron esta investigación
hasta desbordar sus planteamientos originales, en un infructuoso intento por
presentar un corpus documental sobre la rebelión de los Partidos de Huánuco,
Panatahuas y Huamalíes.
La documentación que hemos allegado es el resultado de una escru-
pulosa búsqueda de fuentes primarias en los repositorios nacionales, tanto
limenses como provinciales, de índole oficial, eclesiástica y aún particular. Por
lo que respecta a los archivos extranjeros, la tarea se ha cumplido por la doble
vía de nuestras investigaciones personales, en frecuentes viajes de estudio an-
teriores a esta labor específica, gestionando datos y documentos, o hurgando
en los catálogos y guías de esos repositorios.
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