Page 261 - Vida y Obra de José Baquijano y Carrillo - Vol-1
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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             Vida y obra de José Baquíjano y Carrillo
            acompañan; portentos que admiran menos, que la extravagante causa que los
            ejercita, y actos de virtud  que, desconocidos a la sencilla piedad, le hacen ex-
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            clamar con un escritor célebre non ergo  in ómnibus quae faciunt Sancti sunt
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            imitabiles; sed sapienter, et caute debent laudari.
                    Esta reflexión sabia sigue el orador en el retrato que expone de la R.
            Madre María Antonia. En él se nos dibuja, no una estéril y árida inocencia, a
            quien la ignorancia,  el defecto de ocasión o una natural simplicidad le hace
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            evitar vicios que desconoce; no una virtud que, por la continua reflexión en la
            victoria, en la misma resistencia prepara a la derrota; sino una alma que des-
            cubriendo, según la idea tan verdadera como ingeniosa de un autor italiano,
            que la memoria es el pulso del amor, jamás interrumpe los tiernos gemidos,
            los suspiros inflamados, por los cuales explica sus ardientes  pero reglados
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            deseos de morir por su Dios; busca donde colocar sin culpa sus afectos sa-
            biendo que la cruel angustia reservada para los eternamente infelices es no en-
            contrar sin delito  centro a su voluntad; y advirtiendo que el dolor, ese clamor
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            excusable de la naturaleza, no ofende ni rebela; que el sombrío silencio en que se
            mantiene inmóvil la víctima sobre la ara del sufrimiento, no honra ni ensalza el
            sacrificio; si cae en esa melancolía profunda, que es la colección de las penas, en
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            13. San Crisóstomo en el tom. 5 Homil 4, expone las razones, por qué Dios no permite que los
            muertos se aparezcan [Nota del autor].
            14. En el cap. 8. de la vida de Juan Rusbrochio canónigo reglar de san Agustín, uno de los mís-
            ticos más acreditados, se refiere que su resginación, a la voluntad de Dios llegaba al extremo
            de conformarse aun con las penas del infierno. V. a Mons. Arnaldo Historia Teologiae Misticae
            [Nota del autor].
            15. Guillermo Neubridge De rebus Anglicis Lib. 2 [Nota del autor].
            16. El Varón de Verulamio refiere, que el Papa Julio no quiso condescender a la súplica de
            Enrique VII, que pedía se canonizase a Enrique VI, pues aunque confesaba sus virtudes, se
            reputaron como de un hombre simple; y los cardenales distinguieron en la congregación en-
            tre inocentes y santos, como distingue el Sabio al Cap. 31 del Eclesiástico donde alaba a el
            hombre: Qui potuit transgredí, et non est transgresus, facere mala, et non fecit. Porque como
            había dicho en el Cap. 20 v. 231 hay algunos que evitan los pecados porque no tienen ocasión
            ni medios para cometerlos; pero en su interior arden en vivos deseos de obrar mal: est qui
            uetatur peccare prae inopia, et in requie sua stimulabitur [Nota del autor].
            17. El padre Francisco Romano, y Felipe Pignar misioneros capuchinos a el norte de Congo,
            en el reino de Overri, escriben a la Congregación de Propaganda los males que han sufri-
            do por haber querido embarazar un sacrificio de cinco víctimas humanas que disponían los
            negros. La Congregación responde: «la Iglesia tiene bastantes mártires, y en el ejercicio de
            vuestras funciones debéis consultar menos el celo, y más la prudencia Hist. moderna de los
            Chinos y Japonés, para servir de continuación a la Hist. antigua de Mons. Rollín, tom. 12 [Nota
            del autor].
            18. Es el sentido de estas palabras tan verdaderas y enérgicas de santa Teresa, hablando del
            Demonio: Ese infeliz, que no amará jamás [Nota del autor].


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