Page 1075 - La Rebelión de Túpac Amaru II - 7
P. 1075

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             La rebelión de Túpac Amaru II
                    5° ltem digan si no es cierto, que habiendo llegado Tupa Amaro a per-
            cibir estos buenos oficios que yo hacía a favor de los europeos, me amenazó
            terriblemente, diciendo que sospechaba de mi servicio y que de seguir así en
            adelante experimentaría sus rigores.
                    6° ltem si no es cierto que a todos los que se hallaban en dicha provin-
            cia de Tinta, los hizo venir a la expedición de Piccho, sin que nadie hubiese
            podido resistirle, porque como tenía de su parte a los indios, eran muy supe-
            riores sus fuerzas.
                    7° Item digan si saben y les consta que a mi me destinó en esta oca-
            sión para que trajese unas cargas de víveres, que en realidad conduje con toda
            aquella infame tropa; la que impidió generalmente entrásemos a esta ciudad
            todos los que lo deseamos.
                    8° ltem si no es cierto que viendo yo, que no era posible entrar a esta
            ciudad me huí para el pueblo de Tungasuca y desamparé al rebelde y todo su
            vil ejército, no habiéndome hallado por este motivo en los combates, que se
            dieron aquí en aquel entonces y exponiéndome al evidente peligro, de que me
            quitase la vida, por causa de esta fuga.
                    9° ltem, si no es cierto que el mencionado rebelde a su regreso de esta
            expedición envió a prehenderme a Tungasuca, con orden de que con un par
            de grillos se me llevase a su presencia.
                    10° Si no es cierto, que con efecto me tuvo preso mucho tiempo, en el
            calabozo de los demás prisioneros, con ánimo de quitarme la vida.
                    11° ltem si no es cierto, que si después me dió libertad, sólo fue por
            máxima y ver si de este modo conseguía afianzar mi servicio, pues él siempre
            me miró a mi con adversión y a todos los de la familia de Nogueras, como lo
            comprueba el hecho de haber mandado matar a mi primo hermano Andrés
            Noguera.
                    12° ltem, si no es cierto que hallándome en dicha provincia por el rece-
            lo y desconfianza que tenía de mí el rebelde, no me destinó nunca para militar
            en expedición alguna, ni jamás hizo que tomase armas para pelear, ni quiso
            que concurriese a las hostilidades que se ejecutaron, empleándome por lo re-
            gular sólo en oficios mecánicos y domésticos.
                    13° ltem digan si les consta, que uno de los principales cuidados del
            rebelde, fue poner espías y centinelas en los caminos, con orden expresa de
            interceptar toda carta y que al español que intentase pasar lo matasen luego al
            punto.



                                               1074
   1070   1071   1072   1073   1074   1075   1076   1077   1078   1079   1080