Page 30 - La Revelión de Tupac Amaru II - Vol. III
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Volumen  3
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            Yndios gentiles, y retirarse despues a gozar el fruto de sus expediciones: que
            no desmayasen en lo comenzado y lograsen su libertad: que bien sabian que
            el amor que en esto les manifestaba tendria por fin el perder la vida en seme-
            jante suplicio, como el que acavaban de ver, pero que lo llevaria con gusto por
            dexar la gloria a su Nacion de verse ya restaurada a su antiguo estado. Pusose
            un cordel al cuello para mas conmover a los Yndios con el instrumento del
            suplicio que se habia enunciado, trayendole sobre sus vestiduras a cuya vista
            todos en confusa griteria se ofrecieron a seguirle, y perder sus vidas antes que
            desampararle.
                    Luego extendio un Bando con este principio: Don Josef Gabriel Tupac
            Amaru Inca, de la Sangre Real, y tronco principal. En el convoca a todos sus
            Amados Criollos Americanos de todas clases asi Españoles, como Mestizos e
            Yndios que quisiesen seguirlo, protestando que el era Catholico Christiano, y
            que en manera alguna violaria las Ynmunidades de la Yglesia: que solo tenia
            por objeto abolir la introduccion de Corregidores, libertar al Reyno de Adua-
            nas, Estancos, y demas Gabelas, y acabar con todo Europeo como principales
            autores de semejantes Establecimientos; pero que aquellos en quienes hallase
            oposicion y resistencia a sus designios, experimentarian sin la menor piedad
            todo el furor de su indignacion. De este Bando, y de otros Edictos remitió con
            sus confidentes varios exemplares para que se fijasen en sitios publicos en las
            Provincias y Ciudades inmediatas como el Cuzco y Arequipa, dando a enten-
            der que todo estaba a su disposicion. Escribió Cartas circulares a los Curas
            para que no impidieran con sus exortaciones a los Feligreses de sus Doctrinas
            seguir este partido. Lo mismo hizo con algunos particulares, aun de aquellos
            con quienes jamas tuvo conocimiento, y en quienes suponia confianzas que en
            realidad no tenia.
                    Ya queda referido de que el traydor Tupac Amaru no asistió al en-
            tierro del Corregidor por hallarse ocupado en otras expediciones. Estas se
            reducen a haver pasado personalmente a Tinta, y saqueado la Casa del dh°
            Corregidor de todo aquello que no pudo cargar en la primera ocasion quando
            venia en compañia del Caxero; y aora tomo quanto havia quedado de gusto
            y estimacion, sin dexar las mulas, ni los víveres de que se proveyó con abun-
            dancia. Despues paso a los obrajes de Parupuquio, y Pomacanchi. Demolio el
            primero, y pilló en él mucha delicada ropa que tubo con que dar las primeras
            muestras de generosidad a los que favorecian y ayudaban su rebelion. En el





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