Page 478 - La Rebelión de Tupac Amaru Vol 1
P. 478

Volumen  1
                                                                          La verdad desnuda


                                           INTRODUCCION


                    No hay cosa tan arriesgada como la publicación de la verdad cuando
            se dirige contra los poderosos del Mundo y sus vicios; porque aunque es siem-
            pre invencible a la maquinación y al artificio, y su brillantez y candor capaz
            de disipar todas las nieblas que se la quieran oponer; es tal el poder del oro
            y de la plata que más de una vez han conseguido, cuando no destruirla, a lo
            menos desfigurarla, bien por una pasión mal reprimida, o bien por un interés
            viciosamente apetecido.
                    Por ser pregonero de la verdad padeció Nuestro Salvador la terrible
            muerte que sabemos. No fué otra la causa de la degollación del mayor hom-
            bre de los nacidos. Y por igual motivo fueron victimas de las crueldades de
            los tiranos esos innumerables gloriosos mártires que venera nuestra piedad,
            y escribieron con su sangre el testimonio más incontestable de la verdad de
            Nuestra Católica Religión.
                    El alevoso e inicuo asesinato del Coronel Don Antonio de Arriaga,
            natural del lugar de Lezama de la provincia de Alaba en los Reinos de Es-
            paña, Gobernador y Capitán General que fué de la Provincia de Tucumán y
            Corregidor de la de Tinta, es indudable haber sido también consecuencia de
            una verdad muy interesante a Nuestro Monarca y al Estado, que avisó a los
            primeros Magistrados de estos Reinos del Perú, según la voz común de sus ha-
            bitantes, y según los documentos originales que se han encontrado; mas como
            los asesinos de aquel recomendable Ministro del Rey están atrincherados en
            la inmunidad más sagrada, sostenidos de las primeras autoridades; y como
            además poseen, sobre unas riquezas inmensas, una cavilación y un artificio
            superiores a toda ponderación, recelan justamente los interesados, afectos y
            parciales de Arriaga, que se propenda con empeño a obscurecer su justicia,
            aun por aquellos mismos que deben dedicar sus fatigas a hacerla manifiesta; y
            que ahogada la verdad de los antecedentes de esta grave causa, en ese inson-
            dable golfo que divide los gloriosos trofeos del mayor Monarca de la Tierra,
            Carlos III, lleguen tan desfigurados los sucesos a nuestra Corte que queden
            impunes los agresores, y en opiniones la inocencia y arreglada conducta de
            Don Antonio de Arriaga.
                    El año de 1719, sucedió en Manila la violenta muerte del Mariscal de
            Campo Don Fernando Bustillo, Gobernador y Capitán General de aquella
            Plaza, y Presidente de la Real Audiencia de ella.




                                               477
   473   474   475   476   477   478   479   480   481   482   483