Page 359 - La Rebelión de Huánuco. Vol 5

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
La rebelión de Túpac Amaru II
Como al entregarmela el Comicionado, huviese advertido en su re-
conocimiento algunos defectos sustanciales, como el de la ratificacion de tes-
tigos, publicacion de edictos, y pregones por los reos profugos y otros que a
mi me parecieron debi encomendarme para no exponer una causa de tanta
importancia, me ha sido preciso Subsanarles del modo mejor posible atenta
la distancia, el interes que se versa y los objetos que le comprehende para que
purificada y aclarada la verdad qual debia ser recaiga sin vacilacion ni escul-
parlos (?) el fallo sobre todo, y cause su afectacion el efecto de remedio a tan
gravisimo mal.
Estas diligencias corren desde fojas 334 y las que ministran el cono-
cimiento de la verdad, y entre otras la de lo que tube el honor de exponer a
Vuestra Excelencia en mi referido informe de 27 de mayo N° 147 en la causa
de la insurreccion de Huanuco y Panataguas, en quanto diese relacion a mi
contradicion qual sea en si el indio y el cuidado con que es preciso proceder
para precitar a censo a sus dichos en todas materias, pero mucho mas en las
que le pertenecen; o tengan algun contacto de individuo, o de interes.
Reconocerá Vuestra Excelencia la monstruosa contradiccion que se
nota entre sus primeras declaraciones, y confesiones practicadas en Huama-
lies ante el Comicionado, a las ratificaciones que ejecutaron en mi Juzgado. En
aquellas fuera de otras cosas resultan autores, y principales agentes promove-
dores y causantes de su insurreccion, ademas de los papeles que les espidieron
desde esta Ciudad Castillo, y sus socios, los Presbiteros Don Tomas Narvarte,
Don Jose Ayala, y los Seculares Pio Miraval, y mas criminalmente Don Do-
mingo Berrospi, mi Comisionado para actuar unas diligencias sobre perjui-
cios de que se me havian quejado los indios contra el Subdelegado y otras
personas pudientes del Partido: Y en las ratificaciones que se han hecho ante
mi, retractados de quanto espusieron en Huamalies respecto de los quatro
indicados individuos pero mas particularmente de Ayala, Miraval y Berrospi.
La causa que han espuesto para una contradiccion tan considerable es
la fuerza, la amenaza, y los azotes con que pensionaron a algunos, e intimida-
ron a otros, dicen los mismos retractados.
Yo creheré si, que con conocimiento del caracter de los indios, su es-
tupidez, su suma malicia, su embelicimiento, su indiferencia, su casi absoluta
ignorancia de la religion, y de lo que obliga al juramento huviese tenido por
conveniente el Comisionado a vista de la dureza, ostinacion, y reveldia de al-
gun testigo amenazandolo, y aun dandole algunos azotes, pues aun entonces

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