Page 218 - La Rebelión de Huánuco. Vol 5

Volumen 5
Documentación oficial de la revolución de 1812 en la Gaceta del Gobierno de Lima
V. E. por el adjunto testimonio N. I. y lo oportuno que fue su pronto arribo
á aquellos pueblos, no solo para restituir el buen órden entre sus habitantes
sino impedir los progresos de la insurreccion que quedaba ya extinguida. =
Los avisos que hace tres dias que recibi de los subdelegados de Caxatambo y
Conchucos, son los mas lisongeros: el primero me dice quedaba calmado y
corregido el movimiento popular que hubo en el pueblo de Aquia, y que llegó
á reunir hasta 1.400 hombres para ocurrir en favor de la justa causa, donde ella
reclamará apoyo: y el segundo me participa, que sabida la victoria alcanzada
por las armas del rey que están á mi mando, quedaban tranquilizados los pri-
meros movimientos que habia causado en los ánimos de aquellos vecinos la
insurrección de Huanuco y Panataguas, apagandose en lo exterior el espíritu
de seduccion que aparentaba la nación índica; habiendo logrado reunir en
defensa de la justa causa todos los vecinos, sugetandolos á cuartel, y disciplina
con la oportunidad de haber tenido en su partido al alferes del regimiento de
milicias provinciales de Tarma D. Manuel Cardenas, cuya actividad y patrio-
tismo recomienda, y yo debo hacer presente, que este oficial cumplido aquel
cargo y servicio voluntario, se dirigió á incorporarse á la expedicion que en-
víe á Huamalies, y he mandado se agregue á la segunda de aquel regimiento
que no tenia otro oficial que el capitan D. Tomas Mendizabal, consta de los
testimonios N. 2. y 3. como el celo y buena disposicion de ámbos subdelega-
dos á fin de conservar en quietud sus partidos. = El caudillo principal que se
titulaba general de los insurgentes regidor de esta ciudad Juan José Crespo y
Castillo, con otros muchos comprehendidos en su causa se hallan ya presos,
y ella en disposicion de remitirla á esa superioridad para su sentencia dentro
de ocho ó diez dias. He hecho perseguir por partidas de patriotas á cargo del
práctico D. Juan Martin de Yabar, que prendió á Castillo, y por requisitorias
al subdelegado de Pariarca D. Juan Bezares, á los principales cabezas de la in-
surreccion que fugaron á las montañas de Monzon y otros puntos intrincados
de ellas: y antes de ayer recibí aviso de este último de estar presos cuatro de los
más críminales, según el testimonio N. 4. y espero que sean muy contados los
que se escapen. = Huanuco: esta ciudad, que á mi entrada en ella el dia 20 de
dicho marzo, era un desierto espantoso por la falta de habitantes emigrados, y
escondidos en los cerros, grutas y bosques, se repuebla diariamente volviendo
á sus hogares cuantos los habian abandonado llenos de confianza en la disci-
plina de mi tropa, y su moderada conducta que le inspiró y dió por educacion
su exemplar coronel D. Lorenzo Antonio de Cardenas, y sus dignos oficiales

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