Page 64 - 2014\Sustentación-2014\Sustentacion(1)

El señor PRESIDENTE (Norman David Lewis del Alcázar).— Tiene las dos interrupciones,
congresista López Córdova.

La señora LÓPEZ CÓRDOVA (GPFP).— Presidente, saludo a los señores ministros que
nos acompañan el día de hoy.

Quiero hacer recordar que, en Ancash, los que desfalcaron, los que robaron, los que
asaltaron, los corruptos, fueron las malas autoridades, que deben pagar hasta las últimas
consecuencias; no debe quedar impune ninguno de estos actos macabros. Qué culpa
tiene el pueblo, qué culpa tienen los ancashinos para que, además de haber soportado
tanta corrupción, además de haber llorado por tantos hermanos muertos, ahora tengan
que ser excluidos del presupuesto nacional. No se ha dicho nada de los proyectos para la
región, como el megapuerto, Chinecas, los parques industriales, los hospitales. No se
habla nada de salud, de cultura, ni mucho menos de carreteras. ¿Dónde está la
responsabilidad del Estado, señores ministros? Exijo que Ancash no sea excluida del
presupuesto nacional, porque es un derecho que asiste a todos los ancashinos, que
también somos peruanos, creo yo. ¿O no es así, señores ministros?

Muchas gracias.

El señor PRESIDENTE (Norman David Lewis del Alcázar).— Puede iniciar su intervención,
congresista Aguinaga Recuenco.

El señor AGUINAGA RECUENCO (GPFP).— Presidente: Quiero hacerles llegar un
afectuoso saludo a la señora primera ministra y al señor ministro de Economía.

Hoy día hemos asistido a la presentación, tanto de la primera ministra como del ministro
de Economía, de manera emocionada y optimista, de lo que se considera el mayor
presupuesto en la historia republicana del país.

Si tuviésemos que hacer un símil de esta presentación, recogeríamos también a otro
miembro de su Gabinete, y no nos quedaría sino decirles: ¡presupuesto ra, ra, ra!, porque
aquí hay serias contradicciones. Por eso, cuando vemos este gran presupuesto, que es
más de cuatro veces mayor que el presupuesto del año 2000, advertimos que, a
diferencia de aquellos momentos, hoy día con este presupuesto, que es mucho, como
dice el pueblo, se hace poco; mientras que en aquella épocas, con un presupuesto que
era poco se hacía mucho.

Eran presupuestos en los que primaban la eficiencia y los resultados, en comparación con
un presupuesto donde prima la promesa incumplida y la expectativa violentada; y eso lo
vamos a sustentar. Este presupuesto es tremendamente centralista porque aumenta el
gasto del Gobierno Central de un 67% a un 73%, aumentando la cifra presupuestal.
Estas serias contradicciones las podemos ver, por ejemplo, en el despacho presidencial,
que ha aumentado su presupuesto de 33 millones a casi 40 millones de nuevos soles
anuales.

Es decir, el Presidente de la República en su despacho gasta 109 mil nuevos soles diarios,
más de 40 mil dólares diarios. Nos estamos haciendo émulos de los ricos y famosos en
un país pobre que necesita encontrar la ruta del desarrollo, y ese es el ejemplo que le

64