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Yo le puedo asegurar que el 80% de los congresistas no ha leído todo el Presupuesto de
la nación.
Si bien es cierto este Presupuesto nos habla de impulsar el crecimiento del Perú, yo veo,
sin embargo, dos problemas. Un primer problema que tiene que ver con cómo se ha
recentralizado la parte del gobierno nacional. Un segundo problema es ver cómo se está
hablando de grandes obras, de pequeñas obras, de medianas obras, pero no se habla de
algo que es fundamental, los trabajadores, el trabajador público.
Le he escuchado a una congresista decir: “Vamos a pelear por los trabajadores. A los
trabajadores no se les está considerando como debe ser, lo que es culpa del Gobierno”.
Pero hay que recordar que en el gobierno de Morales Bermúdez la manera más fácil de
resolver los problemas fue el despido de los trabajadores públicos. Desde 1988 para
adelante se despidieron más o menos 30 mil trabajadores.
Presidenta, usted sabe perfectamente que cuando uno llega al Congreso, en estos días
que se discute el Presupuesto, tenemos quinta lista de trabajadores, tenemos los
pescadores, tenemos los jubilados, tenemos cientos de sindicatos que nos dicen que hace
exactamente 20 años no les incrementan el salario. Por eso, creo que debemos tener otra
mirada con respecto al Presupuesto.
Se habla de descentralización, pero este Presupuesto es absolutamente centralista. Se
habla de descentralización y se habla de transferencia de funciones. Se transfieren las
funciones, pero no se transfiere presupuesto. Se habla de crecimiento, pero el Foniprel,
por ejemplo, se está rebajando de 500 millones a 300 millones; o sea, de 500 millones
el 2011 a 300 millones el 2015. Y, entonces, ¿quiénes son los más afectados? Los más
afectados son los gobiernos locales, los más pobres, y los gobiernos regionales.
Se dice que esto es porque los gobiernos regionales y los gobiernos locales no están
funcionando; sin embargo, ya se ha mencionado, por ejemplo, cómo los ministerios que
deberían tener mayor gasto, porque son aquellos que hacen producción en los sectores
pobres, no gastan como se debe: 69% el Ministerio del Ambiente, 62% el Ministerio de
Justicia, 68% el Ministerio de Educación, 62% el Ministerio de Trabajo, 69% el Ministerio
de Energía y Minas, 61% el Ministerio de Vivienda y 61% el Ministerio de Desarrollo e
Inclusión Social. ¿Cómo criticamos, entonces, a los gobiernos regionales y a los
gobiernos locales, si el propio Gobierno Central no está gastando como debe gastar?
Hay deuda social. Tenemos sentencias judiciales con carácter de cosa juzgada que no se
están pagando. Tenemos devengados por distintos conceptos que no se están pagando.
Tenemos compensación por tiempo de servicios que no se está pagando. Tenemos pagos
en casos de materia laboral, materia previsional, víctimas de actos de defensa del Estado
y víctimas por violación de derechos humanos que no se están pagando.
Planteamos a la Comisión de Presupuesto que autorice a las unidades ejecutoras utilizar
los saldos…
La señora PRESIDENTA (Ana María Solórzano Flores).— Tiene tiempo adicional,
congresista Simon.
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