Page 299 - La Rebelión de Huanuco - vol 3
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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             La Rebelión de Huánuco de 1812
                    (Al margen)
                    A la tercera: Que á visto á Mirabal con su piquete de soldados servir de
            aucilio a los Jueces siempre que se ha ofresido y responde.
                    (Al margen)
                    A la quarta: Que no lo ha visto á Mirabal en juntas ó compañias sos-
            pechosas de que le resultase la representacion de los Jueces, y responde.
                    (Al margen)
                    A la sexta, dijo: Que el dia que fueron los Yndios á la primera expedi-
            cion de Ambo hiendo la declarante de la Yglesia á asu Casa vió que á Jose Mi-
            rabal lo llevaban los Ynsurgentes en medio de ellos, y que en la esquina de su
            casa que dicen la de Yscuchaca estando sentada la declarante en la puerta de
            su casa, le dieron á vista de ella la bandera por fuerza para que la llevase, y que
            el la recivio como medio muerto, Que José Rodrigues se la entregó disiendole
            que á el le correspondia llevarla, en cuyo acto los Yndios le digeron que sino
            la llevaba se quedaria en la Esquina dandole á entender que lo matarían: Que
            tambien le consta que los Yndios lo buscaban para matarlo por haver ido á To-
            mayquichua en solisitud de gente á fabor de la justa causa: Lo que observó la
            declarante desde su quarto por que á la huerta de Morales que está inmediata
            á su havitacion se entraron dichos Yndios diciendo que alli podia estar Mi-
            rabal, y que á el lo querian por haver ido en busca de gente contra ellos: Que
            save por noticias que le dio la muger de Mirabal de que á su marido le havian
            robado los Yndios, y que su Escopeta se le havia caydo al rio, y responde.
                    (Al margen)
                    A la septima: Que la ignora, y responde.
                    (Al margen)
                    A la octava: Que la ignora, y que solo puede decir que Mirabal con su
            muger se fueron de la ciudad antes de la segunda expedicion á Ambo, y que
            los Yndios heran unas fieras, y no respetaban a nadie, y responde.
                    (Al margen)
                    A la novena: Que la muger de Mirabal á los pocos dias que llegue yo
            con mi tropa á esta ciudad le contó que los Yndios lo buscaban por los cerros
            a su marido para matarlo, y que ella se vino á este lugar con la tropa despues
            de haverse ausentado antes de la segunda expedicion á Ambo, lo que save por
            que la declarante fue la que la curó en sus enfermedades, y responde.
                    (Al margen)
                    A la decima: Que ignora, y responde. _



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