Page 542 - Vida y Obra de José Baquijano y Carrillo - Vol-1
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Volumen  1
                                                                 Correspondencia de Baquíjano II


                                    Sevilla 21 de febrero de 1816.


                    Tengo seguidamente las cartas de usted, pues la de 2 de febrero que era
            la única que me faltaba se me entregó atrasada al correo inmediato, hoy sé que
            me ha faltado la que corresponde al pasado viernes 16 y no sé si será el mismo
            extravío, pero estoy sin cuidado pues sé que no hay novedad alguna y que co-
            rren en su giro los asuntos de nuestro apreciable amigo Valencia, me escribe
            haber hablado con usted lo que me asegura su buena salud y la de la familia.
                    Me ha sido de mucha complacencia la publicación de las bodas del rey,
            pues las señoras infantas de Portugal y su respetable madre, como que han
            estado en América del Sur, tienen noticias muy exactas para proporcionar los
            medios de tranquilizar esos dominios y no carecen del conocimiento de los
            sujetos que por sus méritos, servicios y amor al soberano son acreedores a la
            estimación y recompensa.
                    Mucho me da que esperar el no proveerse la secretaría de nuestro be-
            nemérito ministro, el rey es de intenciones muy rectas y decididas para el bien
            de sus pueblos, si llega a penetrarse de la verdad, no me queda duda que triun-
            fará de sus rivales.


                                   Sevilla, 28 de febrero de 1816.


                    He recibido las de usted de 20 y 23 del presente y quedo sin cuidado
            por la del 16, pues ya me avisa usted haber estado muy ocupado aquel día,
            celebro muy mucho que el amigo se halle con entera salud y que no lo abatan
            las contradicciones ni intrigas de sus émulos, aquí se había dicho que se había
            nombrado para sucederlo en el ministerio al obispo de ciudad Rodrigo y que
            éste había renunciado este cargo, mas el mantenerse la secretaría en interini-
            dad me hace creer que no hay nada de verdadero sino vagas voces que finge
            uno y repiten muchos.
                    También se ha escrito que ha habido algunas prisiones en Madrid y
            todo efecto de un maldito fraile (según aquí lo caracterizan), nombrado Rol-
            dán, que en tiempo de las Cortes alborotó bastante.
                    En la adjunta esquela digo a usted el medio que ha de tomarse para
            que no entren en poder de Peciña los dos vales y en cuanto al malicioso
            arbitrio de memorial ajustado y papel en derecho, sólo hay que hacer esta



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