Page 238 - Guerrillas y montoneras durante la Independencia - Vol-5
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Volumen 5
                                                                        Documentos de 1823
            y por una cooperacion enérgica para abrir la campaña por esta parte contra
            los Españoles. Su Excelencia tuvo la satisfaccion de recibir poco despues una
            comunicacion de la Municipalidad de Huaras en que espresa los mas vivos
            sentimientos de sumision y de amor á la paz y la tranquilidad. Estos docu-
            mentos que tengo el honor de incluir á Vuestra Señoría en copia instruirán á
            Su Excelencia el Presidente de la jenerosa oferta que el Libertador ha hecho
            al vecindario de Huaras, y de las disposiciones que muestran los pueblos en
            favor de los designios de Su Excelencia y del Ejército Unido.
                    Su Excelencia se promete no sea infructuosa la marcha del Ejército so-
            bre esta Provincia; pues aun cuando el Señor Riva Aguero rehuse la incorpo-
            racion de sus tropas á las Libertadoras, se convencerán al menos los pueblos,
            de la pureza de los sentimientos con que Su Excelencia ha venido en busca de
            sus hermanos para que juntos vayan á hacer la guerra contra los enemigos.
                    Dios guarde á Vuestra Señoría.
                    Señor Ministro.
                    El Secretario Jeneral interino.
                                                José de Espinar (Rubricado)


                                   B.N.P. Mss. Correspondencia, s. cat.



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                    Noviembre 24.
                    Secretaria Jeneral del Libertador.
                    Cuartel Jeneral en Huaras 24 de Noviembre de 1823.
                    Al Señor Ministro Secretario de Estado en el Departamento de la Guerra.
                    La inmoralidad de las tropas del Señor Rivaguero y la excuperacion
            por el mal tratamiento que han recibido, há llegado á tal estremo que ape-
            nas se presenta la menor cuyuntura cuando abandonan las filas. Asi es, que
            el batallon y el escuadron que tenian de guarnision en esta Ciudad se han
            dispersado del todo, y no verifican un solo movimiento los cuerpos que com-
            ponen el ejercito disidente sin que sufran una desercion conciderable. En este
            estado, Su Excelencia el Libertador cré no deber contar sino con muy pocos
            hombres de los que militan bajo las ordenes del Señor Rivaguero, por que ó
            estos se disuelven completamente en marchas y contramarchas, ó tienen que



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