Page 160 - Guerrillas y Montoneras durante la Independencia 4
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Volumen 4
                                                                        Documentos de 1823

                                   A.C.D.P. Mss. Leg. 5, C. 4, N° 40, s. cat.

                                              1,540


                    [Carátula]
                    En 18 de Marzo de 1823 resolvió el Congreso que el recurrente se diri-
            ja á la Alta Cámara de Justicia para que le administre la que le corresponde.
                    Numero 173
                    Justicia 526
                    Comision de Memoriales.
                    Don Fransisco Calero dise: Que despues de haver estado confinado
            injustamente al Departamento de la Costa, por haver sido el primero que de-
            clamó contra el despotismo, regresó al seno de su familia; pero con el dolor
            de tener que vivir bajo el govierno del Español Don Custodio Alvares, en cuya
            prueba acompaña el adjunto espediente, cuyo segundo escrito fue rechasado a
            pretesto de que no estava en el sello correspondiente haviendo resivido hasta
            entonses en papel blanco, por no haver querido havilitar ninguno, y que ade-
            mas le embio un recado verbal redusido a desir; que no se dava por resivido,
            que nadie podia ponerle leyes, y que no temia a nadie: Que dicho Governa-
            dor ha emplasado a su tribunal al Presvitero Don José Santos Mesa, por una
            pequeña deuda, hollando su fuero: Que al minero matriculado Don Patrisio
            Bermudes le pusó en la Carsel publica por 10 pesos a pesar de sus notorias
            calamidades, y pobresa, del mismo modo que a Doña Remigia Origuela, por
            una fiansa verval, a fabor de un compadre suyo, a cuya mujer tambien la pusó
            en la misma carsel, y ambas por una deuda de 20 pesos. Que ha hecho compa-
            reser ante si a los Curas de Carhuamayo, y Huariaca, por una deuda de 100 y
            tantos pesos hasta el estremo de haserlos exivir sin remedio, con comminasio-
            nes de clavarle dos pares de grillos al de Huariaca, despues de haverlo llevado
            con una escolta de dose soldados a pretesto de infidensia, no siendo la causa
            sino de injurias verbales: Que insulta y atropella a todos los ciudadanos hon-
            rrados, y a los benemeritos patriotas, como tambien los estatutos, reglamentos
            y bases, por que esta rodeado de los mas perversos, con el titulo de corchete,
            y tiene a su disposision las bayonetas civicas del Mineral. Por estos, y otros
            exesos que detalla, implora la piedad del Soverano Congreso, para que se dig-
            ne hechar quanto antes, una eficas, tierna, y benefica mirada, sobre aquellos
            pueblos tan interesantes.



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