Page 208 - La Rebelión de Túpac Amaru II - 7
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Volumen  7
                                                              Causas criminales contra los rebeldes
            de Miguel Alvarez y Felipe Bermúdez, a quien puso guardias con el mandato
            de que no le permitiesen hablar con nadie, pero supo el confesante por sus
            compañeros que al citado Don Antonio había preso Túpac Amaro, diciendo
            tenía orden del Rey para ello, que desde el día siete en que los prendieron has-
            ta el diez, en que ahorcaron al dicho Don Antonio no ocurrió más que haberle
            mandado dicho Túpac Amaro al confesante, que escribiese una esquela a Don
            Hermenegildo Rojas, cobrador del pueblo de Combapata, en dicha Provincia
            de Tinta, llamándolo de orden del patrón del que confiesa, cuya esquela firmó
            dicho Túpac Amaro; y que se acuerda empezaba la esquela, “compañero y
            amigo, de orden del Corregidor se servirá Vuestra Merced venir” y en efecto
            vino el día siguiente, que fue antes de ahorcar a dicho Arriaga.Que el día diez
            en que fue la muerte de su patrón, lo vió sacar por un resquicio de la ventana;
            y que no sabe otra cosa, sino que al día siguiente se partió Túpac Amaro para
            Quiquijana, /. 29 en cuyo tiempo se mantuvo el confesante preso en el cuarto
            y que vuelto Túpac Amaro a los dos o tres días empezó a despachar cartas y
            bandos a varios caciques y curas, todo lo que escribían el confesante, Felipe
            Bermúdez, Miguel Alvarez y los Castelos, vecinos de Sicuani, con advertencia
            de que el confesante sólo escribía los bandos y las comisiones, no las cartas,
            porque éstas las escribía Bermúdez; y solo hace memoria haber escrito una a
            esta ciudad, dirigida a Don Vicente Puente, Cura de Coporaque, pero que esto
            le parece fue después de la función de Sangarará.- Que después de haber re-
            mitido dichas comisiones y bandos Túpac Amaro, aunque el confesante tenía
            alguna mas libertad, bien que sin salir de la casa no notó el confesante, ni oyó
            cosa particular, hasta que habiendo llevado la noticia de que salía tropa de esta
            ciudad, convocó dicho Túpac Amaro a todos los caciques de la Provincia de
            Tinta y otras, para que llevasen toda la gente, cuyas cartas escribió el confesan-
            te y los demás expresados; y habiendo salido dicho Túpac Amaro para Sanga-
            rará se quedó el que confiesa con la mujer del rebelde y habiendo vuelto éste
            dispuso su viaje para Caylloma por Velille, el día veinte y dos de noviembre,
            pero siempre se quedó el confesante preso, que cuando marchó dicho rebelde,
            dejó en su lugar mandando la gente a Francisco Molina; que Diego Ortigoza
            le dictaba las cartas y que la mujer de dicho Túpac Amaro mandaba mas que
            (palabra ilegible) /. 29v pues primero se le preguntaba, que era lo que convenía
            hacer y daba las providencias. Que en este tiempo remitieron varias verduras
            y que el confesante escribió la carta dando las gracias, pero no se acuerda a
            quien, solo si que firmó por Micaela Bastidas, mujer de dicho rebelde.- Que a



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