Page 362 - La Rebelión de Túpac Amaru II - 4
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Volumen 4
Conclusión de la rebelión
mas sencible que quando estos infelices ocurrian a aquellos a la consequcion
de su justicia y derecho, eran arrojados con improperios y empellones. Por lo
que no hacian mas que clamar como los Hebreos para sacudir la opresion de
tantos Faraones, y se veian precisados a abstenerse de los alimentos espiritua-
les como son la Misa, Palabra de Dios, Santos Sacramentos, y demas auxilios
por no recibir muchos perjuicios viniendo a las Parroquias o Pueblos en los
tiempos destinados, porque en estos estaban los referidos jueces y Mandones
como unos Ogros para ecigirles y cobrarles; como qualquier cura y persona
christiana lo podrá deponer; y omitiendo por la brevedad el expecificarme
mudamente de estos perjuicios en lo espiritual, paso a apuntar algunos en lo
temporal.
Pues es constante que los repartos solo se introduxeron en beneficio de
los Naturales segun lo demuestran las innumerables Cedulas y Leyes que so-
bre este particular tratan. Pero lejos de seguirse este beneficio, solo percibian
todo el perjuicio e incomodidades, a causa de que los Corregidores abusando
de los repartos gravaban enteramente a los Naturales dándoles efectos que no
les servian, y en precios exorbitantes; y porque hablo con V. S. Y. que es tan en-
tendido, lo diré en una palabra: Que jamas dichos Repartimientos fueron con
arreglo a las Tarifas, ni que en ellos se guardaban la cantidad, ni la qualidad,
ni alguna otra condicion; siendo tan ciega y desproporcionada la codicia de
los corregidores, y demas Mandones, que no tenian otro miramiento que sus
grangerias y utilidades postergando enteramente la conversion, conservacion,
y buen tratamiento de los Naturales; no habiendo corregidor que asomase a
su Provincia, sin hallarse fatigado de una insaciable sed y avaricia, por la que
se han resultado tantos males que en los tiempos pasados se han llorado, y en
los presentes se sienten, y sentiran en los venideros.
Porque segun el Apostol San Pablo la codicia es lazo del demonio in-
centivo de dañosos deseos, y raiz de todos los males. Y lo notaron bien Tito
Libio, Seneca, y otros en la conquista de los Romanos, naciendo de la codicia
la poca Paz y benevolencia, y no hay cosa mas proporcionada para la conser-
vacion espiritual y temporal de los subditos que el pacifico y suave tratamien-
to, pues asi nos lo enseña el exemplo de Christo Vida nuestra: de los Sagrados
Apostoles, y la Historia Sagrada y profana; y la principal grangeria que de los
yndios se debe sacar, solo debe ser su convercion enseñanza, y conservacion,
pues para esto fueron encomendados a los Fieles Christianos y Catolicos Mo-
narcas de las Españas por especial providencia de Dios.
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