Page 49 - La Rebelión de Huánuco. Vol 4
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Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
             La rebelión de Huánuco de 1812
            Don Lorenzo Cos de la insurrección del Pueblo de Chupan de lo que ignoraba
            de los entierros que iban á hacer, y que ya una estaba ya enterrada, no bien
            llegué al Pueblo quando llegó el Alcalde Josef Lucas, su Rexidor que empesó a
            exortarlos que por que se havía sublevado, y para que havían enterrado a esa
            mujer, y les dixe que el Señor Governador Yntendente a latignasos ha muerto
            a todos los yndios, y en esto pedí havíos para retirarme y no huvo, quien diera
            quando en esto también me avisaron que la Yglesia de Marias estaba arrui-
            nada por la entrada de los Capitanes, y que también pasarían a Chuquis, y
            Chupan, entonces respondí diciendo que la cuidacen quando en esto me dijo
            el Alcalde que no tenían armas ni menos defenza que ocurrirían por armas a
            Huánuco y entonces dije yo que también por mi parte haría lo que pudiese,
            y entonces me aprontaron dos mosos y con ellos escapé en quatro alapingas
            toda mi pobresa y me estuve por las estancias de Collosa desde el martes hasta
            el sábado víspera de Ramos que se me aparesieron dos Yndios llamados Jo-
            sef Andrés (al margen y entre paréntesis: y Eucebio Rocinera) estando yo ya
            en las Estancias de Yachas esperando alguna nobedad favorable, y estos me
            avisaron que estaban derrotados por los Pachasinos y en el instante armé mi
            viaje para el Pueblo de Chupan esa tarde de sábado, y quando venían noticias
            que el Jues de Chavín tenía 300 hombres aquartelados para salir a sujetar a
            todos los insurreccionarios, y por esta noticia, para no verce saqueados es-
            taban todos los yndios extraviando sus quipes y todo lo que havían rovado,
            y por esto no vi yndio alguno en el Pueblo quando en esto se me aparesió
            Sevastián Cos estando yo resando en la puerta de la Cárcel, y no tuvimos más
            conversación que de la barbaridad del entierro, y de los que restaba, y se fue
            hasta el miércoles Santo que se me aparesió con un tintorero llamado Matías,
            y era ya oras de comer que les convidé, y luego que acabamos de comer me
            suplicó por dos petacas que tenía se lo tuviese en un quarto, y en acto le dixe
            que lo traxesen, y estando yo en la cocina metieron las dos petacas que en ellas
            se han encontrado mucho del saqueo, y le reuso al tal Cos del falzo que me
            ha formado por no haver tenido ninguna conversación con el, ni menos con
            el tal Ferrer que no me visto ni antes de la insurjencia ni menos después por
            eso por ser un público ladrón provado estaba asegurando sus vestias y todo
            lo que havía estafado, y como a tal sujeto lo reuso del falzo testimonio que me
            acomula como así también a todos por que estos falsos declarantes coligados
            por que me deven cantidad crecida de pesos me han tramado tal testimonio
            sin temor a Dios ni a la Relixión que ni aun la conocen, ni menos saven resar



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