Page 426 - La Rebelión de Huanuco - vol 3
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Volumen 3
Autos criminales contra las personas involucradas en el saqueo de Huánuco
teniendo ótro exercisio para ganar su vida que el de llevar la pluma á los Jueses
del lugar, y otras personas de representación, era comprendido en el número
de los proscriptos por los Sublevados; que el deponente tiene su avitacion a
espaldas de la de Doña Petronila Beraum, muger Iexitima de Don Alfonso
Mejorada, y los criados ó dependientes de esta, por encargo suyo rrompieron
la pared de mediania, a fin de trasladar á su Casa y salvar todo aquello que
pudiesen, vien que no llegaron a trasportar otra cosa que una Petaca vacia, y
un Colchon viejo, por quanto los Yndios en mucha copia no les permitieron
la extracsion que deseavan y todo lo destrosaron; que pasando casualmente
uno de los Yndios saqueadores por la apertura de dicha pared, advirtio que
la tierra estava floxa y movida, y sospechando que estubiesen alli enterra-
das algunas especies, llamó inmediatamente a sus compañeros que estavan
dentro de la casa y descubrieron, un Caxon de chocolate, un Baul lleno de
arros, una Petaca de ropa de uso, otra de Jabon, y un Baul que aseguró uno
de los muchachos de Doña Petronila ser tambien de ropa y estava serrado;
que el que declara suplicó encaresidamente a los Yndios que no hiciesen
daño en todo aquello, valiendose de varios arvitrios que surtieron su efecto
y efectivamente se retiraron dexando aquellas especies, que posteriormen-
te conduzo á su casa Doña Alexandra, Peseros como encargada de Doña
Petronila, ecepto el Baul cerrado que se pasó al Beaterio por uno de los de-
pendientes de la misma Doña Petronila; Que el citio abuqereado ó escavado
para enterrar lo que lleva referido, está en la pertenencia de Doña Petronila,
y sus mismos sirvientes fueron los que hicieron aquella ocultación, como
tambien la rotura de la Pared, segun tiene dicho, de mandato de su Patrona,
y sin consentimiento del declarante ni de su Padre, de cuyo echo violento
han resultado muchas consequencias odiosas, y principalmente que haya
padesido el onor del que depone; que como tres o quatro dias despues del
arribo del Señor Governador Yntendente encontró el que declara en medio
de la calle unos quadernillos de papel blanco, y un emboltorio de ropa de
uso, lo que conduxo á su Casa con el designio de pasarlo al Depósito Gene-
ral, pero haviendo visto aquello casualmente la mencionada Doña Petronila,
aseguró perteneserle y se apoderó de ello, con cuyo motivo pasó á una Sala
inmediata, en donde estavan alojados dose o mas Soldados y encontrando
alli muchos retasos de Genero pretendio tambien ser suyos, y se los llevó,
no obstante la disputa que hubo con dichos Soldados, quienes le asegura-
van que todo aquello pertenesia á sus Compañeros que havian ido en el
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