Page 282 - La Rebelión de Huánuco. Vol 1
P. 282
Volumen 1
Declaraciones y confesiones sobre los movimientos subversivos en Huánuco
Capital al referido emisario, enseñandole las casas de los principales vecinos,
acompañandole hasta el pueblo de la Oroya, haviendole preparado mircapa ó
fiambre, y cuidandole una yegua hasta su buelta. Diga la verdad sobre estos
puntos, y los más que sepa, y exprese el nombre, calidad, patria, figura y ves-
tuario de dicho emisario.
Dixo: que es verdad que por el tiempo de cosecha del año proximo
pasado, llegó al citio de Tarmatambo en casa de Francisca Guizha un hombre
mestizo de virrete asul, calsado con media negra, vestido de ante, varva co-
lorada, y poncho de fresadilla de daditos, que este dijo que venia reclutando
soldados, que en primera instancia expuso ser natural de los Reynos de Espa-
ña, y despues de Huancavelica; que esto contó á dicha Ynes, y poco después la
dijo que Fernando Septimo estava preso, y que en Jerusalen havia renunciado
el cargo de Rey de España en el supuesto Ynca, que yá venia á botar á todos
los cavalleros españoles para que aquartelados pasase á España á defender al
Rey Fernando, que los mestisos, é yndios havian de pagarle solo dos reales de
tributo, que los yndios volverian á los dominios de sus tierras, y que en señal
de obediencia, y gratitud havian de salir á recivirle con danzas, y otros prepa-
rativos: que haviendo Leon Chagba yerno del que se confiesa oido esto en casa
de su madre dicha Francisca se lo contó; que por esta curiosidad, y alegrando-
se del bien que venia á los yndios, pasó á esa casa, se hiso su amigo, y lo trajo
á la suya en donde le asistió por algunos dias, y le volvio á referir lo mismo
que havia oido; que replicandole el confesante que su Rey Fernando manda-
va, aunque estava preso, le contestó calla yndio vosotros no saven á donde
está su Rey, y siguió en su conversacion. Que trabucando la alforga de dicho
comisario á ver si traya pan le encontró muchos papeles, y un retrato del Rey
Ynca. Que como el confesante nó save lér, ni escrevir, nó puede dar rason que
asuntos contenian. Que es falso que huviese estado toda una noche escrivien-
do con velas encendidas, que quiciese coronarse, ni hacer palacio en el pueblo
viejo, sino que infirio que el tal Ynca lo haria en ese citio, y asi lo parló con
su muger, Lorenza Amaro, su yerno Leon, y Josefa Ollero, muger de Lorenzo
Amaro, quien lo supo todo tambien por el mismo emisario quando estuvo en
casa de Francisca, y que esta lo contó á su marido, Lorenzo, diciendole, que era
Escolero, y que para que enseñase á sus hijos pasó á verle nevando un poco de
leche, que dicho Lorenso Amaro nó quiso crér á tal emisario, haciendo zumba
de sus relaciones, diciendo seria algun ladron embustero. Que así mismo es
falso trajese á ese hombre para enseñarle las casas de los vecinos de Tarma,
281