Page 303 - Guerrillas y montoneras durante la Independencia - Vol-6

Nueva Colección Documental de la Independencia del Perú
Guerrillas y montoneras durante la Independencia
Paselo Usted bien y compadescase de este su reconocido hijo que besa
su mano.
José María Pagador (Rubricado)
En merito de esta carta se apersono el Doctor Uribe al bosque donde
estaba oculto Pagador con la correspondencia de San Martín y se hiso cargo
de ella despues de haber hablado con el, y proporcionándole todos los auxilios
condusentes al reparo de su salud.
Entre la correspondencia que trajo Pagador de Chile, le entrego este a
Uribe en mano propia que el traia para el de dicho San Martín, la misma que
es la que sigue.
Comunicacion del Jeneral San Martín al Doctor Uribe.
Cuartel J.eneral en Valparaiso a 1° de Julio de 1820.
«Despues que en una larga serie de años, de agitaciones é incertidum-
bres de la guerra sagrada de la libertad, han puesto á una dificil prueba la
paciencia y generosos deseos de todo buen Americano, párese que la fortuna
nos há conducido ya al punto en que debemos esperar una terminacion felis.
No se trata ahora de anuncios que la malicia del enemigo ha interpretado
imaginarios ó que el temor ayudado de la distancia há trasvertido y figurado
improbables. De hecho la espedicion libertadora se halla yá desembarcada en
el territorio del Perú, y miles de hombres formados en Legiones, ván desde
estas playas á concluir con el despotismo virreynal, y todos sus secuases.
«Tampoco puede insistirse ya en la alta justicia, que precide las ope-
raciones de esta guerra, [ilegible] no hubiera sido discutida ni hubiera jamas
triunfado ante el tribunal de la opinion publica, era suficiente [ilegible] de la
necesaria á todo americano y vastara para que fuese sagrada el que envolviese
intereses tan grandes y guiados a una [ilegible] la existencia de una gran parte
del genero humano en la America del Sud.
«Sobre este consepto y en consecuencia de los seguros informes que
he recibido de los nobles sentimientos que distinguen la persona de Usted no
puedo, menos que lisongearme y esperar que hallándonos en el caso de que
se manifieste el Patriotismo en todas direcciones, el zelo de Usted coopere en
cuanto este á su alcanse a fin de acrecentar nuestra grande obra. Felismente
Usted se halla en una posicion en que por el influjo de su caracter, de su for-
tuna y opinion, puede desimprecionar a unos, confortar a otros y estimular á
todos para que el ene-migo sea privado de los últimos recursos con que cuente
para prolongar la desolacion y miseria de esos habitantes. Asi es que, convir-

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