Page 124 - Guerrillas y montoneras durante la Independencia - Vol-5
P. 124

Volumen 5
                                                                        Documentos de 1823
            reunidas, con orden de perseguir al enemigo, y tomar posecion de la Provincia
            de Huarochiri.
                    Desde ese dia, hasta el de hoy lo he perseguido infatigablemente mar-
            chando de dia y de noche hasta el Rio de Santiago, en que tomando el enemigo
            su direccion por Yauracmayo, me ha sido imposible seguirlo a causa de que las
            partidas sumamente fatigadas con las continuas marchas, no habia un hombre
            que pudiese hacer una de dos leguas, ni caballos en que montarlos; sin embar-
            go pude tomar sinquenta de los mejores, entre mulas y caballos, y formando
            dos partidas las hé mandado con orden de ostilisarlo por su retaguardia, y
            protejer la desercion.
                    Tambien hé tenido en consideracion para no seguir mis marchas ade-
            lante la poca disiplina de las partidas y el numero tan desigual del enemigo á
            estas; pues me exede como en mil hombres, no teniendo yo mas de 400, pues
            las Partidas de Canta al mando del Sargento Mayor Ayulo, se separaron por
            estar absolutamente imposibilitadas de marchar. Asi mismo he tenido en con-
            sideracion que no pudiendo las Partidas de Guerrillas obrar con ventaja sobre
            el enemigo, sino por los cerros, y habiendo tomado éste las pampas y llanuras,
            probablemente hubiese sido derrotado pues él tiene soldados disiplinados, y
            buena caballada, careciendo yo de todo.
                    Ha sido de suma utilidad mi marcha por esta Provincia pues persua-
            didos los tiranos, de que un Exercito era el que los perseguia y picandoles su
            retirada no les di tiempo para que executasen sus iniquos proyectos de acabar
            con esta Provincia de Huarochiri; y pasar á la de Yauyos á hacer lo mismo
            como lo habian determinado, por que impidiendoles su marcha, han tomado
            su direccion á Jauja, presipitadamente. Con todo les hemos hecho algunos
            pequeños males, y tomado mas de 100 pasados.
                    Son increibles, los daños que estos sacrilegos han causado en esta Pro-
            vincia á su ida para la Capital. No han dejado casa, que despues de saquearla
            no la haygan quemado: lo mismo há susedido con las sementeras, y con los
            templos en que han sacado hasta los Santos y las Imagenes de Nuestro Señor
            Jesucristo y los han echado al fuego, es presiso ver, para creer lo que han exe-
            cutado, y á mi ida para la costa lo que pude escapar de sus perfidas manos fue
            la custodia de San Lorenso, y algunas cosas de la Iglesia. A su retirada á Jauja,
            no les hé dado lugar para que lleven ni una sola cabesa de ganado; pues son
            tan cobardes estos infames que pudiendome derrotar no han pensado en mas
            que en correr presipitadamente con los robos que han hecho de la Capital.



                                               123
   119   120   121   122   123   124   125   126   127   128   129